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La tecnología podría destruir 85 millones de puestos de trabajo, pero creará aún más

Silvia

Redactora especializada en Seguridad y Tecnología.

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White male cyborg thinking and touching his head 3D rendering
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La crisis económica que ha provocado la pandemia de la Covid-19 a nivel global y la automatización del trabajo podrían provocar grandes cambios en el mundo laboral. Así lo determina el nuevo estudio del Foro Económico Mundial (FEM), que lleva por título Informe sobre el futuro del empleo.

Según señala el Foro Económico Mundial en su página web, el Informe sobre el futuro del empleo "traza un mapa de los trabajos y las habilidades del futuro, siguiendo el ritmo del cambio. Su objetivo es arrojar luz sobre las alteraciones relacionadas con la pandemia en 2020, contextualizadas dentro de una historia más larga de ciclos económicos, y explorar las perspectivas que se esperan en los próximos cinco años respecto a la adopción de tecnología, los empleos y las habilidades".

El informe proporciona información detallada para 15 sectores empresariales y 26 países avanzados y emergentes, España entre ellos. A continuación, repasamos los principales hallazgos, destacados por el FEM, y algunas de sus conclusiones respecto a nuestro país.

La Covid-19 acelera la automatización del trabajo

La pandemia de la Covid-19 ha acelerado la transformación digital en la mayoría de las empresas y también ha despertado el interés en las nuevas tecnologías. Al encuestar a 300 de las empresas más grandes del mundo, que juntas suman ocho millones trabajadores, el FEM descubrió que el 43% están dispuestas a reducir su fuerza laboral debido a la integración de la tecnología.

Las cifras señalan que las nuevas tecnologías podrían destruir 85 millones de puestos de trabajo en los próximos cinco años. "El FME predice que en 2025, las máquinas realizarán hasta el 65% del procesamiento y recuperación de información y datos, dejando solo el 35% del trabajo a los humanos. Esto significa que algunos roles serán cada vez más redundantes en los próximos años. Empleados de entrada de datos, contables y auditores, y trabajadores de fábricas se encuentran entre los trabajos que el WEF espera que sean particularmente desplazados por la automatización", resalta el portal especializado ZDNet.

Asimismo, los datos indican que, a diferencia de años anteriores, la creación de empleo se está ralentizando mientras que la destrucción de puestos de trabajo se está acelerando. Sin embargo, también arrojan una perspectiva positiva para los trabajadores ya que prevé que, al tiempo que unos trabajos se destruyen, surgirán unos nuevos. De hecho, el FEM pronostica que, para 2025, se pueden crear 97 millones de puestos de trabajo que se adapten mejor a la nueva división entre humanos, máquinas y algoritmos.

"El crecimiento de los llamados 'trabajos del mañana' compensará la falta de demanda de mano de obra en trabajos que puedan ser ocupados por máquinas. A la cabeza de puestos con una demanda creciente, la encuesta sitúa los vinculados con la economía verde, los datos, la inteligencia artificial y la computación en la nube. Analistas de datos, especialistas en aprendizaje automático, ingenieros en robótica o desarrolladores de software", subraya el citado portal.

Así prevé que serán los "trabajos del mañana"

El FME considera que la automatización y la recesión provocada por la Covid-19 están creando un escenario de "doble perturbación" para los trabajadores. "Además de la alteración actual del confinamiento y los recortes económicos inducidos por la pandemia, la adopción tecnológica por parte de las empresas transformará las tareas, los trabajos y las habilidades para el 2025", afirma.

En este sentido, el 94% de los profesionales encuestados afirmó que esperan que los trabajadores adquieran nuevas habilidades. "En los últimos meses, tanto los trabajadores como las compañías han comenzado a abordar el problema. El número de personas que se han inscrito a cursos online por iniciativa propia se ha cuadruplicado, mientras que tres cuartas partes de las empresas informaron que buscan formas de brindar oportunidades de perfeccionamiento y actualización de habilidades a la mayoría de su personal", apunta al respecto el portal ZDNet.

Y agrega:"Es más, la barrera de entrada de trabajos emergentes no parece infranqueable. Al investigar las trayectorias de LinkedIn de varios profesionales, el FEM descubrió que algunos puestos parecen más fáciles de evolucionar que otros".

Además, el FME reitera que, en este nuevo contexto de recesión global, se van a necesitar medidas contundentes para evitar la pérdida de puestos de trabajos a nivel mundial. "Este año nos encontramos con que, si bien se espera que la creación de empleo impulsada por la tecnología, la destrucción de empleo sea superior en los próximos cinco años. Existe una renovada urgencia de tomar medidas proactivas para facilitar la transición de los trabajadores hacia oportunidades laborales más sostenibles", se lee en el informe.

Las conclusiones del informe respecto a España

Como hemos comentado, el Informe sobre el futuro del empleo del FEM ofrece información detallada sobre 26 países entre los cuales figura España. Estos son algunos de los datos que proporciona:

  • El impacto de la Covid-19 en la estrategia de las compañías: La medida más implantada por las empresas ha sido la aceleración de la digitalización de los procesos de trabajo (92,9%). Le sigue la implementación del teletrabajo (85,7%) y la mayor rapidez en la digitalización de las habilidades (78,6%).
  • La adopción tecnológica: El análisis de datos y la Inteligencia Artificial son los ámbitos en los que las empresas más están recurriendo a la tecnología. Ambas cuentan con un porcentaje del 96% y la computación en la nube se sitúa muy cerca con un 92%.
  • Los tres puestos de trabajo emergentes más demandados son los profesionales del internet de las cosas (IoT), los analistas de datos y científicos, y los especialistas en Big Data. Por el contrario, las tres posiciones que se están convirtiendo en innecesarias son las encargadas de la introducción de datos, el secretariado administrativo y ejecutivo, y el personal de contabilidad.
  • Las tres habilidades emergentes más demandadas por las empresas son: el pensamiento analítico y la innovación; el aprendizaje activo y las estrategias de formación; y el análisis y pensamiento crítico.