El método que frena el acoso escolar plantea dudas frente al ciberbullying

Silvia

Redactora especializada en Seguridad y Tecnología.

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Acoso escolar - Bullying
Acoso escolar - Bullying

Después de que hace unos días el portal is4K (Internet Segura For Kids) advirtiera a los adultos cómo evoluciona el ciberacoso o ciberbullying a medida que lo hace la tecnología, ahora Panda Security ha dedicado un artículo a hablar sobre el método KiVa Digital y a si puede ser la solución de este problema.

Según explica la compañía de ciberseguridad española, la metodología KiVa tiene su origen en Finlandia y ha conseguido reducir drásticamente la tasa de acoso escolar o bullying (tanto presencial como digital). Su nombre responde al acrónimo de las palabras finlandesas Kiusaamista Vastaan ("contra el acoso escolar") y es el resultado de la investigación de un grupo de expertos de la Universidad de Turku.

"Su éxito ha sido tal, que los casos de bullying se han reducido drásticamente y el método KiVa ya está implantado en el 90% de los colegios del país escandinavo. El método ya se ha exportado a otros países europeos y a Estados Unidos, donde en su primer año de andadura se logró reducir el acoso escolar entre un 30% y un 50%", señala Panda Security.

Sin embargo, la compañía advierte que "no es una receta mágica" ya que no ha logrado erradicar por completo el acoso escolar. En este sentido, Hervé Lambert, Global Consumer Operations Manager de Panda Security, ha hecho la siguiente advertencia: "La sociedad debe aceptar que el acoso existe y seguirá existiendo, especialmente entre aquellos niños que se escuden en el anonimato que ofrecen las nuevas tecnologías para realizar cualquier tipo de fechoría. Tanto el bullying como el cyberbullying son problemas que afectan dentro y fuera de las aulas y, por tanto, además de metodologías como KiVA, ahora más que nunca hay que contar con tecnologías que velen por la seguridad de nuestros hijos".

Panda Security también afirma que la principal disrupción del método KiVa frente a todas las metodologías que se han implantado antes para luchar contra el acoso escolar es que propone abordar el problema de una forma distinta."En lugar de centrarse en la relación entre la víctima y el acosador, ponen el foco en quienes, por acción u omisión, colaboran en la violencia. De esta manera, se implica en la resolución del conflicto a los testigos. Así, tanto los compañeros que se ríen o fomentan las situaciones de confrontación como aquellos que evitan implicarse (ya sea por miedo o por cualquier otra razón), se convierten en la solución del problema".

Además, la compañía apunta que gracias al método KiVa se evita que los testigos sean cómplices del acoso escolar. "El bullying es un acto de proyección de las inseguridades del propio acosador que recurre al primitivo mecanismo de defensa de humillar a otras personas a las que percibe como más débiles. Por tanto, si el acosador pierde la posición de poder cuando su conducta está avalada por el grupo, el mecanismo deja de funcionarle y opta por dejar de atacar a otros niños".

Panda Security cuestiona si es la solución definitiva

En su artículo, Panda Security también ha cuestionado si el método KiVa es la solución definitiva contra el acoso escolar y ha comenzado advirtiendo que en el plano digital es más complejo de resolver porque muchas veces los menores se parapetan en el anonimato que proporcionan algunas redes sociales o apps.

"Es el caso de las apps para generar contenidos anónimos como F3, una aplicación que viene a sustituir a la ya extinta ThisCrush. Aunque la finalidad de esta comunidad es conocer a otras personas, hay menores que la usan para insultar y atacar a otros e incluso para llevar a cabo acciones de acoso sexual, proponiendo 'hot chats", alerta la empresa de ciberseguridad española.

Además, Panda Security ha destacado que los niños son nativos digitales por lo que perciben el mundo de manera 'omnicanal' y esto lleva a los padres y educadores a tener el doble reto de educarlos y preocuparse de ellos en ambos universos, el digital y el offline.

"Por ello, debemos destacar que el ciberbullying online y a través de teléfonos móviles son la misma forma de acoso escolar que ha habido siempre. Sin embargo, tienen el agravante de que, al llevarse a cabo en dispositivos digitales, para los padres y educadores es más difícil de localizar el acoso", declara la compañía, que agrega que técnicamente es muy fácil llevar a cabo cualquier tipo de ciberbullying.

Ante este panorama, Hervé Lambert ha resaltado que los padres no solo se tienen que preocupar de que sus hijos puedan ser víctimas de acoso, también de su pueden ser los acosadores. "Es de vital importancia que los padres auditemos absolutamente todo lo que hacen nuestros hijos en los entornos virtuales. Así y solo así nos evitaremos disgustos que se evitan con un control rutinario", apostilla el Global Consumer Operations Manager en Panda Security.