Un estudio hecho público por el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism de la Endocrine Society ha incidido en que el déficit de vitamina D es un factor común entre los pacientes con un cuadro más grave de coronavirus que necesitan hospitalización.
Se trata de un estudio de factura española, ya que lo ha realizado el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander. La vitamina D es imprescindible para absorber el calcio y podemos adquirirla tomando el sol. El confinamiento no ha ayudado precisamente a subir los niveles de esta vitamina tan necesaria entre la población en general. También es importante en los procesos de neuropatías, y su deficiencia puede provocar desde ostopenia a osteoporosis y hasta raquitismo en los niños. Hay lugares del mundo, como Terranova, Canadá, u otras zonas como el norte de Europa donde brilla tan poco el sol que algunos médicos la recetan como suplemento de forma habitual.
Vitamina D ni en exceso ni en defecto
Pero es importante consultar a un especialista antes de optar por suplementarse. La ingesta de Vitamina D no va a conseguir que se proteja de la Covid-19 si ni siquiera se sabe a ciencia cierta si se presenta esta deficiencia. Y hay que recordar que un exceso de Vitamina D tomada de forma artificial puede provocar acumulación de calcio en la sangre (hipercalcemia), síntomas como náuseas y vómitos, debilidad y micción frecuente, o incluso perjudicar el buen funcionamiento de los riñones.
En cambio, su deficiencia puede perjudicar a pacientes con enfermedades crónicas como la diabetes mellitus tipo 1, enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide o el síndrome de Raynaud, y hasta la psoriasis, el cáncer de próstata, mama, ovario y colon.
En lo que se refiere a su relación con pacientes de Covid-19, se ha visto que los hospitalizados que presentaban análisis con suficiente vitamina D, con un nivel en sangre de 25-hidroxivitamina D de al menos 30 ng/ml, tenían un riesgo significativamente menor de resultados clínicos adversos incluyendo pérdida del conocimiento, hipoxia y muerte.
Y hay algo muy importante, con lo que cuentan estas personas: tienen niveles sanguíneos más bajos de un marcador inflamatorio (proteína C reactiva) y niveles más altos de linfocitos (un tipo de célula inmunitaria que ayuda a combatir las infecciones), según las investigaciones llevadas a cabo.
"Este estudio proporciona evidencia directa de que la suficiencia de vitamina D puede reducir las complicaciones, incluida la tormenta de citocinas (liberación de demasiadas proteínas en la sangre demasiado rápido) y, en última instancia, la muerte por COVID-19",ha manifestado Michael F. Holick, PhD, MD, profesor de medicina, fisiología y biofísica y medicina molecular en la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston, en Estados Unidos.
Hay más. Una investigación realizada por Investigadores del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba y del Hospital Universitario Reina Sofía reveló que la administración de Calcifediol (Hidroferol, de Faes Farma), metabolito más activo del sistema endocrino de la vitamina D a pacientes hospitalizados de COVID-19 reduce en gran medida su necesidad de ingreso en UCIs. El mencionado estudio sirvió para poner de manifiesto que la vitamina D contribuye a disminuir el Síndrome de Dificultad Respiratoria Aguda que produce el Covid-19. Por ello, el Calciferol puede contribuir a reducir la gravedad de la enfermedad.
¿Cómo conseguimos vitamina D de forma natural?
Es imprescindible tomar el sol todos los días entre cinco y quince minutos. De ahí que a las madres de bebés recién nacidos se les recomiende un paseo diario con el cochecito en cuanto estuvieran en condiciones de salir a la calle con ellos. ya que el mayor proveedor de Vitamina D es el sol.
Las personas mayores saben de lo importante que es para sus huesos la luz, y por eso desde tiempo inmemorial salían a los bancos de las plazas en los pueblos para dejarse acariciar por los rayos solares. Es importante exponer la cara, el escote y los brazos, aunque con prudencia, especialmente si nuestra piel es muy clara, y a que el daño solar crónico también es peligroso. Pero también lo es no exponerse a él. En todo caso habría que rotar las zonas.
En cuanto a los alimentos, los lácteos contienen mucha vitamina D, especialmente los quesos curados y la leche entera. Por ello mucha mujeres que han pasado la edad menopáusica y siguen dietas de adelgazamiento presentan deficiencias serias en el momento de su vida que más necesitan consumirla.
También se encuentra en los ácidos grasos del pescado: el salmón, los huevos, la mantequilla, la casquería, el atún, las nueces, almendras, otros frutos secos, las ostras, las gambas y langostinos; el aguacate y las setas. También tiene vitamina D el mango, el aceite de oliva, el brócoli, la calabaza y la carne de cerdo.