Datos pertenecientes al fabricante de componentes aeroespaciales y de aviación Airbus habrían sido filtrados en la web oscura.
Un actor de amenazas ha compartido algunas capturas de pantalla para mostrar que no va de farol, según recogen algunos medios que informan sobre ciberseguridad.
Entre los datos que se habrían comprometido hay nombres, direcciones, números de teléfono y otros elementos.
El hacker, que usa el seudónimo 'USDoD' ha reivindicado el ciberataque, indicando que obtuvo el acceso a sus archivos a través de una cuenta de empleado de Turkish Airlines. Utilizando esta pudo hackear varias cuentas de clientes del fabricante.
El primero en dar la voz de alarma fue Alon Gal, director técnico (CTO) de la empresa de ciberdelitos Hudson Rock. Este compartió la filtración, señalando que el ciberdelicuente podría tener acceso a 3.200 datos de proveedores de Airbus.
"USDoD revela cómo obtuvo acceso a los datos accediendo a las credenciales de Airbus de un empleado de Turkish Airlines", ha explicado Alon en una publicación de LinkedIn sobre el ciberataque a Airbus.
"Vale la pena señalar que los actores de amenazas normalmente se abstienen de revelar sus técnicas de intrusión, lo que hace que esta divulgación sea extremadamente rara", añade.
Investigando, que es gerundio
Desde Airbus reconocen que al ser un importante actor industrial y de alta tecnología son un objetivo para los actores malicosos. Aseguran estar investigando el incidente para ofrecer más detalles.
“Airbus se toma en serio la ciberseguridad y monitorea continuamente las actividades en sus sistemas de TI, cuenta con sólidas herramientas de protección, expertos cibernéticos capacitados y procesos asociados para proteger a la empresa tomando medidas inmediatas y apropiadas cuando sea necesario. El evento está bajo investigación por lo que no podemos hacer más comentarios en este momento”, ha comentado un portavoz a The Cyber Express.
Hace cuatro años Airbus experimentó una serie de ciberataques que iban dirigidos a sus proveedores, cuyo fin último parecía el robo de secretos comerciales. En aquel momento se acusó a China como principal sospechoso, algo que el país asiático negó repetidamente.