El Ayuntamiento de Sevilla está haciendo frente desde ayer por la mañana a un ciberataque que continúa poniendo en jaque su actividad y que le ha llevado a recibir una demanda de rescate por parte de sus autores a cambio de la restauración de sus sistemas informáticos.
El propio consistorio confirmó a primera hora de la tarde de ayer que ha sufrido un ataque informático, que provocó la caída del servidor informático que da cobertura a todo el sistema de la web municipal, afectando a distintos servicios que presta a la ciudadanía a través de internet. "Los servicios se han interrumpido como medida de precaución hasta conocer el alcance concreto del ciberataque. Estamos trabajando para poder restablecer la normalidad lo antes posible", aseguró el Ayuntamiento hispalense a través de la red social X.
El rescate exigido podría alcanzar los 5 millones de euros
Fuentes municipales han informado que detrás del ciberataque se encuentra "uno de los grupos de hackers más importantes del mundo" y que éste ya se han puesto en contacto con el Ayuntamiento para pedir un rescate como condición para recuperar sus sistemas.
Según ha avanzado Canal Sur radio, la cantidad exigida se sitúa en torno al millón y medio de euros, aunque podría ser mayor y alcanzar los cinco millones de euros, señala Diario de Sevilla. No obstante, las mismas fuentes municipales han aseverado que "en ningún caso se negociará con ciberdelincuentes".
El incidente está siendo tratado e investigado por la Policía Nacional y por el Centro Criptológico Nacional (CCN-CERT), que están trabajando de forma conjunta con el Ayuntamiento. Paralelamente, técnicos municipales y personal externo especializado siguen tratando de restablecer la normalidad lo antes posible, y de determinar el origen y el alcance del ciberataque. En el momento de escribir estas líneas, la web del Consistorio continúa inoperativa, al igual que oficinas virtuales de algunas empresas y organismos municipales.
Finalmente, cabe recordar que esta no es la primera vez que el Ayuntamiento de Sevilla es víctima de piratas informáticos. Hace casi dos años se vio envuelto en una estafa cometida a través de la "suplantación de identidad de la empresa adjudicataria del contrato de las luces de Navidad para cobrar por el servicio", un claro ejemplo de la técnica conocida como 'Man in the Middle' que en este caso permitió a los hackers robar cerca de un millón de euros de las arcas municipales.