Los Ayuntamientos de La Rioja están en alerta por dos ciberestafas perpetradas en apenas un mes y medio contra los Consistorios de Murillo de Río Leza y de Ábalos que han costado 12.000 euros al primero y 75.000 euros al segundo. Así lo señala El Día de La Rioja en un artículo en el que explica cómo se han cometido estos ciberataques de la mano de los alcaldes de ambos municipios.
Según ha indicado el primer edil de Murillo de Río Leza, Sergio Chicote, las alarmas saltaron hace aproximadamente un mes y medio, cuando se dieron cuenta de que aparentemente "el Ayuntamiento había hecho un ingreso de 12.000 euros en una cuenta que no conocemos" y sin justificación alguna. Tal y como ha confirmado Chicote, el Ayuntamiento denunció ante la Guardia Civil que esta transferencia había sido realizada por piratas informáticos, que hicieron como si la hubiera firmado la administración local y, sorprendentemente, días después reingresaron 2.500 euros a la cuenta municipal. "Los datos facilitados por Chicote indican que los estafadores, o al menos su cuenta bancaria, se encuentra domiciliada en el extranjero", apunta el citado medio.
En cuanto a la estafa informática que ha sufrido el Ayuntamiento de Ábalos, indica que se ha basado en el método conocido como 'Man in the middle', del que ya hemos advertido en Escudo Digital. En este caso, el alcalde de Ábalos, Vicente Urquía, ha precisado que los ciberdelincuentes interceptaron una factura de la empresa a la que le fue encargada la reforma de la red de agua potable y pluviales, que terminó la obra el pasado 22 de septiembre. Dicha factura "asciende a 75.000 euros" y la administración local de Ábalos realizó el pago de la misma en "la cuenta reseñada en el correo electrónico, que nada tenía que ver ya con la numeración indicada por la empresa" y que todavía se desconoce a quién ha ido a parar.
El Consistorio, según Urquía, "reaccionó de forma inmediata y lo trasladamos a la Delegada del Gobierno". Desde la Delegación se pusieron en contacto "rápidamente con la Guardia Civil y gracias a la intervención" de la Benemérita, se pudo bloquear la mitad de lo abonado y "esperemos que recuperarlo para trasladarlo a la empresa". La otra mitad del ingreso todavía no se ha podido localizar, si bien la investigación continua en marcha y actualmente se está analizando dónde estuvo el fallo. Es decir, si los hackers atacaron los sistemas informáticos de la empresa o del Consistorio riojano.
Ante estos ataques informáticos, desde la Federación Riojana de Municipios han expresado su preocupación y han instado a los ayuntamientos "a permanecer vigilantes y adoptar cualquier medida de prevención a su alcance", apostilla El Día de La Rioja.