El gigante de las telecomunicaciones japonés NTT ha sufrido una importante brecha de datos. Su equipo de seguridad detectó actividad sospechosa en su sistema de información distribuida y procedió a restringir el acceso al mismo.
La empresa descubrió que se había dado un acceso ilegal a sus instalaciones el pasado 5 de febrero. Un día después confirmó que se podía haber filtrado información.
“Como resultado de nuestra investigación interna, hemos descubierto que parte de la información sobre servicios para clientes corporativos almacenada en nuestro sistema interno, el Sistema de Distribución de Información de Pedidos podría haberse filtrado al exterior. Tenga en cuenta que no se incluyó la información sobre servicios para clientes individuales”, añade.
Una investigación posterior reveló otro acceso no autorizado el 15 de febrero, provocándose el bloqueo de otro dispositivo.
Entre los detalles que se habrían filtrado se incluye el número de contrato, el nombre del cliente (nombre del contrato), el nombre del contacto del cliente, el número de teléfono, la dirección de correo electrónico, la dirección física y la información relacionada con el uso del servicio.
Parece que no llegaron a exponer los contratos de teléfonos inteligentes y los teléfonos móviles corporativos proporcionados directamente por la operadora NTT Docomo.
En total los datos de 17.891 organizaciones habrían quedado 'al aire', a disposición de los ciberdelincuentes. Desde NTT se han comprometido a notificar a los clientes afectados.
No es la primera vez
La nipona se ha comprometido a mejorar las medidas de seguridad, mejorar la calidad del servicio y divulgar rápidamente las actualizaciones.
Lamentablemente, no es la primera vez que esto ocurre. En mayo de 2020 NTT Communications reveló una violación de datos que afectó a cientos de clientes.