La firma Fincantieri Marine Group (FMG), un constructor naval comercial y de defensa que trabaja para la Marina estadounidense y los Guardacostas, ha sido víctima de un ataque de ransomware.
Todo ocurrió en las primeras horas de la mañana del pasado 12 de abril, cuando un grupo profesional desconocido inutilizó grandes cantidades de datos en los servidores de la red del astillero.
El objetivo principal de los cibermalos era afectar a los servidores que albergan datos que se usan para enviar instrucciones a las máquinas de fabricación de control numérico.
Según ha señalado la compañía en un comunicado, tanto algunas operaciones de red como su servidor de correo electrónico, se vieron afectados durante varios días.
“Los funcionarios de seguridad de la red de la compañía aislaron inmediatamente los sistemas e informaron el incidente a las agencias y socios relevantes. Fincantieri aportó recursos adicionales para investigar el incidente y restaurar la funcionalidad completa de los sistemas afectados lo más rápido posible”, señala la firma en un comunicado.
Aseguran que no se han filtrado datos sensibles
Fincantieri también asevera que no tiene evidencia de que la información personal de los empleados se haya visto afectada por el incidente.
A lo que sí ha afectado el ataque es a la fabricación de algunos barcos. El astillero de Wisconsin, que construye el buque de combate litoral de la clase Freedom de la Marina de los EE. UU. y la fragata de misiles guiados de la clase Constellation, ha visto retrasada la producción.
Por ahora no se sabe a ciencia cierta quién estuvo detrás del ataque ni a cuánto asciende el rescate que pidieron.
El ataque a FMG se produce días después de que una agencia de seguridad británica advirtiera sobre grupos rusos alineados con el estado que podrían lanzar ataques destructivos contra infraestructura nacional crítica.