La infraestructura tecnológica del exchange Bitzlato fue intervenida y desactivada en Francia, a la vez que han sido detenidos seis de los principales responsables de la plataforma, todos de nacionalidades rusa y ucraniana.
Encabezada por Europol, la operación ha sido llevada a cabo de manera simultánea en Francia, Portugal, Chipre, Estados Unidos y España, donde la Guardia Civil ha arrestado al CEO y dos directores de la empresa en Barcelona y Valencia, para quienes se ha dictado la prisión provisional.
Como resultado del operativo policial en los cinco países, se han intervenido 18 millones de euros en diferentes criptodivisas, y se han bloqueado más de 100 cuentas de criptoactivos asociadas a Bitzlato por un importe de más de 50 millones de euros. Las autoridades también han incautado vehículos de alta gama, 60.000 euros en efectivo y dispositivos informáticos y smartphones con información de gran interés para el caso.
Las investigaciones indican que Bitzlato es una de las plataformas más utilizadas por cibercriminales de todo el mundo para el blanqueo de criptomonedas, y ha basado su modelo de negocio en este tipo de transacciones. Con base en el mercado ruso y países aledaños, comenzó a funcionar en el año 2016 con el nombre BTC Banker a través de Telegram, ofreciendo un servicio “seguro y anónimo de intercambio de criptomonedas P2P”, según indica la información difundida por la Guardia Civil. Hacia 2018, y con el nombre actual, extendió sus servicios a otros países, lanzó su propia plataforma web y hasta presentó su aplicación móvil.
Este prometido anonimato a los clientes era factible de sostener al incumplir las medidas de prevención de blanqueo de capitales de los países involucrados. No obstante, el análisis de la información obtenida durante la operación, ha permitido obtener detalles de más de 1.000 cuentas de usuarios de Bitzlato, que estarían directamente vinculadas con investigaciones en curso relacionadas con organizaciones cibercriminales en el ámbito de la Unión Europea.
Chainalysis, una empresa de análisis de blockchain, ha revelado en un informe que entre 2019 y 2021 Bitzlato realizó transacciones por más de 1800 millones de euros, de los cuales casi 900 millones provenían del cibercrimen, “fundamentalmente de la venta de servicios ilícitos a través de markets de la dark web y de rescates pagados por ciberextorsiones, fruto de secuestros informáticos tipo ransomware”.