Avast, compañía de ciberseguridad de origen checo y uno de los fabricantes de antivirus gratuitos más importantes, deberá pagar 16,5 millones de dólares y tendrá prohibido vender u otorgar licencias de datos de navegación web para publicidad.
Estas medidas son parte de un acuerdo al que ha llegado con la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. (FTC), quien alega que la compañía y sus subsidiarias habrían vendido a terceros grandes cantidades de datos de navegación agregados y 'reidentificables'.
El último término se refiere a que los datos podían combinarse con otros datos públicos o recopilados por intermediarios para determinar la identidad de consumidores específicos.
Todo esto se llevó a cabo entre 2014 y 2020 sin previo aviso "adecuado" ni consentimiento de los consumidores, según recoge The Record Media.
Asimismo, en su denuncia la FTC señala que Avast "engañó a los usuarios al afirmar que el software protegería la privacidad de los consumidores al bloquear el seguimiento de terceros".
La comisión insiste en que pese a que Avast y sus subsidiarias decían a los clientes que su software bloquearía las "molestas cookies de seguimiento" en realidad se estaba beneficiando de manera flagrante de toda esta información.
De hecho, parece que la empresa checa trasladó estos datos de navegación recopilados a más de un centenar de terceros mediante su filial Jumpshot.
La FTC también destaca que el producto de Avast estaba destinado a brindar seguridad y privacidad, lo cual hace que la violación de la privacidad del consumidor resulte aun más atroz.
Jumpshot pasó a mejor vida
Un portavoz de la empresa de antivirus asegura que han llegado a un acuerdo para resolver su investigación sobre "el suministro pasado de datos de clientes por parte de Avast a su subsidiaria Jumpshot que Avast cerró voluntariamente en enero de 2020". Con esto tratan de desmarcarse un poco de lo ocurrido diciendo que ya dieron carpetazo a su filial estadounidense.
"Estamos comprometidos con nuestra misión de proteger y potenciar la vida digital de las personas", recoge un comunicado de Avast. "Si bien no estamos de acuerdo con las acusaciones de la FTC y la caracterización de los hechos, nos complace resolver este asunto y esperamos continuar sirviendo a nuestros millones de clientes en todo el mundo".
Jumpshot había sido adquirida en 2014 y en aquel momento pasó de ser un proveedor de software antivirus a una empresa de análisis.