La llegada de la pandemia de la Covid-19 disparó la adopción del teletrabajo y la organización de esta forma de trabajar generó satisfacción entre la mayoría de los trabajadores (el 72%), a pesar de que han echado en falta ayudas económicas por parte de su empresa.
Así se desprende de un estudio realizado por Econocom a partir de una encuesta llevada a cabo del 29 de abril al 10 de mayo de este año por IFOP entre 2002 empleados de empresas privadas y públicas de más de 500 trabajadores.
"Este estudio refleja los recursos y medios necesarios de los que deberán disponer las empresas para garantizar las expectativas de los usuarios. La transformación digital es ya un hecho y el teletrabajo ha venido para quedarse, al menos de forma parcial, a través de un modelo híbrido", ha señalado Carlos Perez-Herce, Country Manager de Grupo Econocom.
El teletrabajo ha llegado para quedarse y se ha convertido en un criterio imprescindible
Según este estudio, la pandemia ha acelerado la adaptación al teletrabajo en España con un 51% de los trabajadores que teletrabajan frente al 27% que lo había experimentado antes. Además, siete de cada diez trabajadores consideran que esta crisis va a tener un impacto duradero en la organización del teletrabajo.
En cuanto a las ventajas percibidas por los trabajadores, las principales son el tiempo ahorrado durante los trayectos (94%) y el dinero ahorrado (87%). Por el contrario, la mayor desventaja es la pérdida de las relaciones sociales (77%), que se aprecia como un posible riesgo de aislamiento.
A pesar de que el teletrabajo ha llegado para quedarse, en la situación actual los trabajadores preferirían implantar un régimen híbrido con una media de tres días de teletrabajo a la semana (29%).
Entre sus conclusiones, también destaca que el teletrabajo se ha convertido en un criterio imprescindible para que los trabajadores permanezcan en su puesto de trabajo (55%) o bien busquen un empleo que lo garantice (55%).
La medida principal puesta en marcha por las empresas han sido las soluciones digitales (48%), con las cuales tres de cada cuatro trabajadores se han mostrado satisfechos. Por otra parte, uno de cada tres trabajadores ha declarado que se siente insatisfecho con el material informático (38%), el principal punto de mejora.
El sector público, una transición complicada
Los empleados del sector público se han mostrado más críticos con la transición al teletrabajo y el 45% ha señalado que no ha sido fluida. Además, han manifestado estar insatisfechos tanto con las soluciones digitales que se han implementado (35%), como con los equipos materiales proporcionados (45%-50%).
El margen de progreso del teletrabajo
Aunque la mayoría de los trabajadores se han mostrado satisfechos por las soluciones digitales implementadas por sus empresas, el 43% de ellos también considera que la empresa puede invertir todavía más en otras medidas para poder mejorar la situación. Los propios trabajadores han dibujado las vías de mejora del teletrabajo sugiriendo medidas como un cambio del equipo informático (46%) o soluciones para acceder a las aplicaciones y servidores como si estuviéramos en la oficina (40%).