• Home /

  • /

  • Phishing, ¿es posible recuperar el dinero estafado?

Opinión

Phishing, ¿es posible recuperar el dinero estafado?

Abogado especializado en Derecho Bancario para DPG Legal

En los últimos tiempos, están proliferando el número de estafas y engaños a usuarios sirviéndose de internet y las nuevas tecnologías. Un ejemplo de ellos es el phishing, estafa que consiste en obtener datos de una víctima mediante la suplantación de la identidad de un actor real, como un banco, una empresa, una marca o incluso una persona física. El objetivo es obtener información personal o bancaria a través de correos electrónicos enviados a la víctima con el fin de obtener dinero en el futuro a través de acciones directas que realice este, o datos que se puedan convertir en dinero mediante acciones que realizarán los ciberdelincuentes valiéndose de ellos, como realizar pagos con tarjetas, sacar dinero de los cajeros o realizar transferencias.

Responsabilidades de los protagonistas

Por un lado, el usuario víctima se puede amparar en el nuevo marco legal europeo, cuyo objetivo es proteger a los usuarios un entorno más seguro y confiable, utilizando las innovaciones tecnológicas recientes. Esto se logra mediante un marco de responsabilidad casi objetiva de la entidad bancaria.

Mientras, el proveedor de medios de pago debe cumplir con las obligaciones establecidas en el contrato implementando los procedimientos de seguridad necesarios para garantizar la identidad del ordenante y la autenticación de la operación. La Directiva de Servicios de Pago (DSP2) requiere que los bancos realicen órdenes de pago mediante autenticación reforzada.  Debido a que las operaciones de pago solo se consideran autorizadas cuando el ordenante ha dado su consentimiento (Art. 36 LSP), el banco debe devolverle inmediatamente el importe de la operación si el usuario niega haber autorizado una operación (Art. 45 LSP).

¿Cómo recuperar el dinero sustraído?

Muchas víctimas creen que es difícil recuperar su dinero si han sido víctimas de phishing. Esto se debe, en parte, a que se consideran culpables por haber picado, y, por lo tanto, no están dispuestos a presentar una denuncia para recuperar su dinero. Pero, en realidad, es más probable que recupere su dinero de lo que pensamos porque se trata de una estafa, no de una transferencia voluntaria en la que alguien hace una transferencia porque quiere.

Una vez que se ha logrado cometer esta estafa, la víctima debe comunicarse con su banco para informarse y aprender sobre los procedimientos de la entidad en estos casos. Después de eso, es recomendable presentar una denuncia detallando los hechos y proporcionando tantas pruebas como sea posible. Si el banco no atiende esta reclamación, nuestro consejo es que ésta se entregue a abogados especializados en delitos informáticos para que intercedan en su nombre y, así lleven a cabo las acciones legales necesarias para la restitución de los fondos.

La probabilidad de que se recupere este dinero es más alta de lo que pensamos porque, como he comentado, se trata de una estafa, no de una transferencia voluntaria. El componente de estafa hace que la acción sea ilegal y elimina cualquier indicio de voluntad de la víctima en los hechos, lo que permite que la víctima pueda presentar una demanda con éxito.

Por lo tanto, contando con el asesoramiento legal necesario, podremos recuperar todo el dinero que nos fue sustraído de manera delictiva y que este hecho quede solo como un mal recuerdo y no transciendan sus consecuencias.