La Policía Nacional ha detenido a una fugitiva húngara que llevaba en busca desde hace diez años y figuraba en la lista de los "European Most Wanted Fugitives", desarrollada por Europol y la red ENFAST, por la comisión de varios delitos económicos y de falsedad documental de suma importancia en su país de origen, donde también era una de las prófugas más buscadas tras haber huido con más de dos millones de euros que había conseguido de manera ilícita.
Según informan la Dirección General de la Policía y el Ministerio del Interior en un comunicado conjunto, la fugitiva, especialista en relaciones bancarias y fraudes crediticios, se apoderó de este dinero entre los años 2005 y 2012 en colaboración con otras dos personas, con quienes creó diversas sociedades fantasmas para dar apariencia lícita a la procedencia de ese capital.
A mediados de 2012, fue condenada en Hungría a más de diez años de prisión por los delitos de estafa, fraude y blanqueo de capitales. Se trataba de las primeras sentencias impuestas contra ella pero, antes de su ingreso en prisión, desapareció de su país sin dejar rastro, desconociéndose su paradero exacto hasta el momento de su arresto y mientras, además, mantiene otras causas abiertas por las que debe ser juzgada, en las que está acusada de otros presuntos delitos de falsedad documental, fraude y estafa. Por estos últimos hechos, se enfrenta a otras penas que exceden los 15 años de privación de libertad.
Se escondía en la República Dominicana y ha sido detenida en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas
El comunicado también explica las hipótesis que se han ido planteando las fuerzas policiales hasta que han terminado capturando a esta fugitiva.
Según señala, las primeras sospechas apuntaban a que se escondía en Tailandia, donde había sido detenido uno de sus colaboradores. Sin embargo, las pesquisas iniciales y la colaboración entre las distintas autoridades de Alemania, España y República Dominicana dieron un giro a la investigación al permitir, durante el pasado mes de enero, situarla en este último país. Tras varias semanas siguiéndole la pista, los agentes consiguieron detectar su presencia en la República Dominicana, donde vivía protegida por una influyente comunidad húngara y aparentemente llevaba una vida "normal" bajo una identidad falsa. Además de cómo normal, el comunicado también describe su vida como "familiar", ya que la fugitiva había contraído matrimonio en este país con un hombre de nacionalidad dominicana, con quien comparte una hija de corta edad.
Una vez que contaban con toda esta información, las autoridades dominicanas y españolas establecieron un dispositivo conjunto para proceder a su detención, que se ha llevado a cabo en el puesto fronterizo del aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas cuando llegaba de un vuelo procedente de la República Dominicana.
"La arrestada ha vivido durante más de diez años evadida de la Justicia, logrando llegar a distintos países y disponiendo de gran facilidad de acceso a documentación falsificada, lo que dificultaba enormemente su detección", apuntan la Dirección General de la Policía y el Ministerio del Interior.