El robo de cobre es una actividad delictiva al alza, habiendo pasado de estar limitada a la delincuencia marginal a ser igualmente objetivo de las mafias internacionales, según hemos informado en Escudo Digital advirtiendo que se trata de un "modelo de negocio" menos lucrativo que otros, como el narcotráfico, pero que implica escaso riesgo para sus perpetradores, principalmente porque las fuerzas policiales no pueden cubrir todo el territorio.
No obstante, los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil han conseguido capturar a un total de 40 ladrones de cobre en dos operaciones simultáneas que ambos cuerpos han sacado a la luz este viernes a través de notas de prensa.
En el caso del operativo de los Mossos, ha resultado en la detención de los cuatro miembros de una organización criminal presuntamente responsable de seis robos de cobre en instalaciones ferroviarias de la demarcación de Barcelona, incluido el que paralizó la red de Rodalies en plena jornada de elecciones autonómicas el pasado 12 de mayo, registrado en la línea de tren de Barcelona – Montcada i Reixac y que también desató varios avisos de incendios en distintos puntos de las vías de cercanías. No menos relevante es la operación de la Guardia Civil, en la que se ha detenido a 36 personas e investiga a otras seis por el robo de más de 34 kilómetros de cable en cuatro provincias.
A continuación, explicamos más detalles del desarrollo y las consecuencias de estas acciones policiales basándonos en la información trasladada por los propios cuerpos.
Desarticulación del grupo que desató el caos en Rodalies
A raíz del robo de cable que dejó sin servicio la red de Rodalies de Renfe el pasado 12 de mayo, los Mossos d'Esquadra desplegaron efectivos de Policía Científica en los lugares afectados para realizar inspecciones oculares.
La opción de que se tratara de un sabotaje, como planteó el ministro de Transporte y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, fue descartada por la Unidad Central de Incendios Estructurales y la principal línea de los agentes de la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos fue que se encontraban ante un grupo criminal especializado en hurtos de cable de cobre.
La DIC de la Región Policial Metropolitana Norte (Metronord) ya estaba siguiendo la pista a una trama especializada en este tipo de asaltos, por lo que asumió la investigación, en la que también han jugado un papel clave otros dos cuerpos de seguridad. Y es que los dos primeros detenidos, un hombre de 52 años y una mujer de 24, fueron pillados in fraganti por vigilantes de seguridad privada de los Ferrocarrils de la Generalitat este pasado miércoles, 22 de mayo, en la localidad de Esparraguera. Se acababa de producir un corte eléctrico con afectación a la circulación ferroviaria y fueron interceptados por los vigilantes, que alertaron a la Policía Local del municipio. Ambos fueron trasladados a dependencias policiales y allí quedaron detenidos por su presunta implicación con otros hechos que se estaban investigando, entre ellos la sustracción de cable de cobre que provocó el caos en Rodalies el 12 de mayo.
Solo un día después de estas primeras detenciones, los agentes de la DIC de Metronord de los Mossos arrestaron a los otros dos investigados en Sabadell y en Santa Perpètua de Mogoda. Uno de ellos es el propietario de una empresa gestora de residuos, también formaba parte del grupo criminal desarticulado, actuando en connivencia con los otros tres detenidos a la hora de recibir el material sustraído. El cuarto detenido, de 26 años, ejercía funciones más ejecutivas y se encargaba de los tratos relativos a la receptación del material sustraído. También es el titular de los vehículos que utilizaba la banda, una furgoneta en la que cargaban el cobre que robaban y un coche.
Los Mossos d'Esquadra relacionan a los detenidos con seis robos de cableado de cobre de catenaria, todos ellos cometidos en menos de un mes, desde el 1 al 22 de mayo, día de los primeros arrestos. En consecuencia, a los cuatro se les imputan estas seis sustracciones, así como delitos de desordenes públicos por cada una de ellas y pertenencia a grupo criminal. Además, el empresario también está inculpado de un delito continuado de receptación y se le ha impuesto una sanción por incumplimiento de la normativa, ya que se negó en dos ocasiones a las inspecciones requeridas por la DIC.
Los cuatro detenidos se distribuían diferentes roles para actuar y son multirreincidentes, acumulando una veintena de antecedentes por hechos similares. Este viernes por la mañana han pasado a disposición judicial.
36 detenidos y 6 investigados por robar más de 34 km de cable en cuatro provincias
En paralelo a la operación de la policía autonómica catalana, la Guardia Civil ha detenido a 36 personas e investiga a otras seis por el robo de 34.215 metros de cable en las provincias de Ávila, Valladolid, Córdoba y Sevilla. Esta cantidad de cobre extraída estaría valorada en dos millones de euros.
La operación, denominada 'Ascia', se enmarca en el "Plan permanente de Respuesta de Actividades Ilícitas relacionadas con el Cobre", impulsado por la Secretaría de Estado del Seguridad del Ministerio del Interior. Ha sido desarrollada por el Grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) y el Equipo ROCA, ambos pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Ávila, provincia en la que el pasado verano se intensificaron los servicios de prevención ante robos de cable de telefonía y en la que ha sido explotado el operativo.
El pasado mes de febrero, mientras se realizaba un dispositivo de vigilancia, los agentes sorprendieron a dos individuos cortando tendido de cable telefónico en la N-110, en Padiernos (Ávila). Huyeron del lugar, pero después fueron interceptados y detenidos con un total de 870 kilogramos de cableado de cobre, que fueron intervenidos.
Posteriormente, otra patrulla de la Guardia Civil pilló a dos personas cortando cableado de cobre en otra zona un poco más alejada de Padiernos, que tras las diligencias oportunas fueron puestos a disposición judicial.
Más adelante, los investigadores averiguaron los lugares donde se efectuaba la quema del cable, en la localidad de Vicolozano (Ávila). Allí volvieron a sorprender a dos personas que ya habían sido detenidas y a un tercer individuo, quienes además estaban vulnerando normas medioambientales, con el riesgo añadido de incendio forestal.
Han sido esclarecidos un total de 38 hechos delictivos dentro de la provincia de Ávila, lo que ha resultado en la recuperación de 13.108 kilos de cobre sustraído.
Según explica la Guardia Civil, el modus operandi de este tipo de organizaciones criminales es el siguiente. Los principales responsables hacen un primer viaje para localizar las zonas óptimas en donde poder actuar, preferentemente en lugares donde los postes de las líneas telefónicas discurren paralelamente a las carreteras secundarias. Una vez inspeccionados los lugares idóneos, contratan a personal y se organizan distribuidos en grupos, trasladándose en furgonetas a las zonas señaladas, principalmente en horario nocturno.
Con diferentes herramientas, cortan varios centenares de metros de cables. Posteriormente otros los trocean en grupos de dos metros aproximadamente -para su mejor tratamiento y traslado- y otros los cargan en las furgonetas. Cuando consideran que han recogido suficiente, se dirigen a lugares apartados y ya ubicados anteriormente, en los que "queman" las camisas protectoras, para así facilitar la extracción limpia del cable de cobre.
Finalmente trasladan el material a intermediarios y a chatarrerías ya concertadas, donde se lo compran y blanquean de forma ilegal. De esta forma se obtiene el beneficio económico fuera de los cauces legales.
Los 36 detenidos en esta operación están imputados de los delitos de robo con fuerza, daño, incendio forestal y pertenencia a grupo criminal.