Días antes de la final de la UEFA Champions League, que se ha disputado este pasado sábado en el Stade de France, en Escudo Digital advertimos que la Policía Nacional tenía miedo porque sentía que París se iba a convertir en la capital mundial de los carteristas. Desgraciadamente, su sospecha se ha cumplido y ha superado con creces sus expectativas ante una alarmante falta de seguridad que convirtió el evento en una fiesta para los delincuentes de la zona y en una pesadilla para los aficionados del Real Madrid y del Liverpool.
La falta de seguridad estuvo acompañada de una pésima organización y, además de ser alarmante, es incomprensible. Si nosotros mismos avisamos con antelación de los planes de las bandas de la zona, planes que conocía la policía española y que, consecuentemente, también debía conocer la francesa, ¿por qué no se pusieron en marcha medidas efectivas para prevenir altercados? ¿Cómo es posible que se actuara con tal negligencia en un evento de tales dimensiones y en un escenario como Saint Denis (uno de los barrios más marginales de París)?
El drama pudo ser mucho mayor y todas las miradas están puestas en las autoridades francesas y en la UEFA, pero por ahora nadie asume la responsabilidad. La seguridad de Francia y su capacidad organizativa también ha quedado en entredicho, y preocupa a solo dos años de que París sea la sede oficial de los Juegos Olímpicos 2024, precisamente con el Stade de France como uno de sus puntos neurálgicos al acoger las ceremonias de inauguración y de clausura, así como las pruebas de atletismo.
Continuos atracos, amenazas, agresiones… y aficionados rociados con sprays de gas pimienta
Según han denunciado aficionados de ambos equipos, tanto en las redes sociales como en medios de comunicación, sufrieron una auténtica encerrona por parte de gente del barrio francés, de varias razas, que se vio alimentada por una inoperante Policía y un despliegue policial excesivamente escaso. Los hinchas narran que fueron víctimas de continuos atracos, amenazas y agresiones por parte de estos radicales, que actuaron tanto antes como después del partido desatando el pánico y el caos.
Los incidentes también incluyeron una avalancha de personas que intentaron acceder al estadio sin entrada o con entradas falsas, especialmente en los accesos de los aficionados del Liverpool. Ello provocó que la UEFA se viera obligada a tomar la insólita decisión de retrasar el partido, 36 minutos exactamente, mientras que algunos asaltantes se colaron en el estadio saltando la valla y la policía francesa recurrió a la utilización de gas pimienta para dispersar a los aficionados, lo que denota que se encontró desbordada y ha generado mucha polémica ya que rocío a aficionados con entrada, entre ellos niños y niñas.
Pedro Niembro, enviado especial del informativo de Antena 3, fue testigo de los altercados en las inmediaciones del Stade de France. "Los disturbios comenzaron mucho antes del inicio del partido cuando esa turba de jóvenes delincuentes se dedicaron a robar a todos los espectadores que estaban en los alrededores del estadio. Pillando móviles, bolsos, carteras... Cuando se acercaba el partido asaltaron una de las puertas por las que todavía entraban los hinchas del Liverpool e intentaron colarse. La Policía intervino con gases lacrimógenos para despejar esa puerta, evitando que entrasen algunos de los asaltantes, pero también medio millar de hinchas del Liverpool que sí tenían entrada".
Por su parte, su compañera Rocío Martínez, presentadora de Antena 3 Deportes, también vivió esa situación de primera mano y ha reconocido que pasó miedo: "El Stade de France está situado en Saint-Denis, es un barrio complicado, con mucha delincuencia. Había muchos jóvenes de allí y de otras zonas de la periferia de París que intentaban colarse... algunos lo consiguieron. Os voy a contar mi experiencia personal. Yo ayer pasé miedo. En la entrada del estadio robaban móviles porque las entradas iban en el móvil. Ahí íbamos todos con el bolso bien agarrado. Y en la salida había como más de cien jóvenes que estaban ahí para robar. Conozco muchos casos de robos. Yo salí corriendo de ahí", contó a Matías Prats en el informativo del fin de semana.
El también periodista Vicente Ruiz, del diario El Mundo, comparó esta final con otras a las que ha asistido, "todas las modernas", y afirmó que "nunca hasta hoy vi una ciudad tan desbordada por la delincuencia y el caos. Nada que ver con la París de la final contra el Valencia".
La denuncia de Julia Vigas, mujer de Thiago Alcántara: "La final fue una pesadilla total"
Los incidentes de la final de la UEFA Champions League también afectaron a familiares de los propios futbolistas, como es el caso de Julia Vigas, mujer del futbolista español del Liverpool Thiago Alcántara. Vigas ha compartido su testimonio a través de sus redes sociales, donde ha descrito la final como una "pesadilla total" y ha exigido responsabilidades. Así ha narrado su experiencia:
"No me gusta comentar estas cosas pero esta vez necesito expresarme. La final fue una pesadilla total, y esto no se trata de fútbol, va mucho más allá del resultado.
Por la falta de organización y seguridad, hubo muchos momentos de miedo. Fuimos amenazados constantemente por bandas de ladrones, que intentaban asaltarnos y se colaban en el estadio sin entrada.
Por eso, muchos simpatizantes se quedaron fuera del estadio provocando avalanchas de gente. La Policía arrojó gases lacrimógenos a las familias y los aficionados, y algunos de ellos también fueron golpeados. Todos ellos siendo personas inocentes.
Debido a todo este problema, tuvimos que salir escoltados del estadio por nuestra propia seguridad. Hay que hacer algo, este tipo de cosas no pueden pasar en ningún tipo de evento y pedimos responsabilidad. Pudo haber sido mucho peor...".
La UEFA achacó los incidentes en el acceso a las entradas falsas, que bloquearon tornos habilitados para hinchas del Liverpool
Una vez terminó el partido, la UEFA emitió un comunicado para explicar que los incidentes en el acceso al estadio se debieron a "miles de aficionados que habían comprado entradas falsas".
"Antes del inicio del partido, los tornos en la zona del Liverpool fueron bloqueados por miles de aficionados que había comprado entradas falsas que no funcionaban en los tornos. Esto creó una acumulación de aficionados que intentaban entrar (al estadio). Como consecuencia, el inicio del partido fue retrasado 35 minutos para permitir el acceso del mayor número posible de hinchas con entradas originales", argumentó.
La UEFA también señaló que, tras el inicio del partido, el número de personas que se encontraban fuera del Stade de France siguió aumentando por lo que "la policía les dispersó con gas lacrimógeno y les obligó a salir del estadio".
"La UEFA se solidariza con los afectados por estos hechos y revisará urgentemente estos asuntos junto con la policía y las autoridades francesas, así como con la Federación Francesa de Fútbol", concluye su comunicado.
También cabe señalar que, en un primer momento, la UEFA achacó el retraso del partido a "problemas de seguridad" pero posteriormente aseguró en los videomarcadores del estadio, en el mensaje con el que anunció públicamente la demora, que se debía a "la llegada tardía de los aficionados", una versión que ha desatado críticas en las redes sociales como esta que culpabiliza directamente a los grupos organizados locales que se dedicaron a robar "a los espectadores y asaltando el estadio para entrar".
La Policía de París también culpa a los aficionados sin entradas o con entradas falsas y hace este balance
Cerca de 7.000 policías y gendarmes se habían desplegado en París con motivo de la final de la UEFA Champions League, y por lo que parece no fueron ni mucho menos suficientes. La Prefectura de la Policía de París también ha responsabilizado de los incidentes en los accesos del estadio a la cantidad de aficionados que iban sin entradas o con entradas falsas.
"Antes del encuentro entre los clubes de Liverpool y Real Madrid, numerosos aficionados sin entradas para el partido o con entradas falsificadas interrumpieron el acceso al Stade de France, a la altura del perímetro de seguridad exterior. Ejerciendo una fuerte presión para entrar en el recinto, estos aficionados retrasaron el acceso a los espectadores con entradas. Aprovechando esta acción, cierto número de personas lograron traspasar la valla que protege el recinto del estadio", explicó en un comunicado.
Pese a estos altercados, la Prefectura de la Policía de París prosigue asegurando que "la rápida intervención de la policía permitió la vuelta a la calma y la evacuación de los alborotadores fuera de la explanada del Stade de France".
"La dispersión de los espectadores se ha producido sin dificultad. No se observó ningún incidente importante en las dos fan 'zones'", apuntó.
Tanto la UEFA como la policía francesa sugieren que los responsables fueron los aficionados ingleses y, en una publicación posterior, la última actualización sobre la final de la Champions, la Prefectura de la Policía de París insiste en que no se registraron altercados en ninguna de las dos fan zones e informa que, en total, se produjeron "68 detenciones gracias a la vigilancia policial". Según concreta Le Parisien, 39 de los detenidos pasaron a disposición judicial y hubo 174 heridos leves.
El Liverpool FC y el Gobierno británico piden una investigación
El Liverpool FC no esperó a que terminara el partido para manifestar su malestar por los incidentes de entrada al estadio. A las 23:10h lanzó un comunicado en el que anunció que ha solicitado formalmente una investigación sobre las causas "de estos problemas inaceptables".
"Estamos muy decepcionados por los problemas de entrada al estadio y la ruptura del perímetro de seguridad que enfrentaron los fanáticos del Liverpool esta noche en el Stade de France.
Este es el mejor partido del fútbol europeo y los seguidores no deberían tener que experimentar las escenas que hemos presenciado esta noche.
Hemos solicitado oficialmente una investigación formal sobre las causas de estos problemas inaceptables", señala la nota del Liverpool.
El Gobierno británico se ha sumado a la petición del Liverpool FC. La ministra de cultura, Nadine Dorries, ha emplazado a la UEFA a abrir una investigación formal sobre la violencia que sufrieron los aficionados ingleses a las puertas del Stade de France.
"Las imágenes y los relatos de los aficionados del Liverpool y de los medios de comunicación sobre la entrada anoche en el Stade de France son muy preocupantes", ha afirmado Dorries en declaraciones recogidas por la cadena británica Sky News.
"Miles de aficionados con entradas viajaron a París a tiempo para apoyar a su equipo en el partido más grande de la temporada. Pido a la UEFA que abra una investigación oficial sobre lo que fue mal y por qué en coordinación con el personal del estadio, la Policía francesa, la Federación Francesa de Fútbol, la Policía de Merseyside y el Liverpool FC. Beneficia a todos los implicados comprender lo que pasó y aprender de estos acontecimientos", ha añadido.
Thibaut Courtois, portero del Real Madrid y MVP de la final, también ha querido pronunciarse al respecto publicando este tuit en el que se limita a mostrar su pesar por el tratamiento que recibieron los aficionados del Liverpool.
"Lo siento por cómo fueron tratados los hinchas del Liverpool. Espero que todo el mundo llegara bien a casa", ha escrito el guardameta belga.
Ayuso lamenta los "fallos tremendos" de organización y seguridad de la final de la Champions
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha referido este lunes a los incidentes ocurridos en Saint Denis, en donde estuvo presente, tras un acto que ha tenido lugar en la estación de Metro Estadio Metropolitano.
"Hubo problemas para acceder al estadio y al finalizar. Nos consta de numerosos testimonios de madrileños, de ciudadanos que se desplazaron hasta el estadio de Saint-Denis, que fueron atracados y pasaron momentos muy angustiosos. De hecho, tanto es así que el comienzo de la Champions se retrasó", ha asegurado en declaraciones a los medios.
Ayuso ha remarcado que unas 30.000 o 40.000 personas se acercaron al estadio sin entrada y "más de 2.000 pudieron incluso acceder".
"Evidentemente, esto demuestra que ha habido fallos tremendos de organización y de seguridad y a mí, además de sorprenderme, me molesta profundamente porque pienso en todas las familias que se han desplazado hasta allí con sus ahorros, con sus esfuerzos y han tenido que pasar por situaciones como esas, incluso con niños. Y la verdad es que me parece muy triste", ha declarado.
Tras estas palabras, ha destacado que si por algo se caracteriza la Comunidad de Madrid es "por organizar las cosas de otra manera" y ha puesto varios ejemplos: la celebración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima 2021, "que en tan solo un mes se pudo poner en marcha con total seguridad"; la final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y River Plate en el estadio Santiago Bernabéu y la final de la Champions League en el Wanda Metropolitano.
"Somos una región donde todas las administraciones nos ponemos al unísono a trabajar por la seguridad y la integridad de los ciudadanos y se ve que en este caso no ha sucedido lo mismo. Lo lamento profundamente, sobre todo insisto, por todas aquellas personas que se han desplazado desde otros rincones del mundo, especialmente desde Madrid, a pasar un fin de semana en familia y de celebración y han vuelto con auténticos disgustos", ha sentenciado Ayuso.
El Gobierno francés sigue señalando a los aficionados del Liverpool y la UEFA confirma que abrirá una investigación
Representantes del gobierno francés de la policía y de la UEFA se han reunido este pasado lunes en París "para abordar los disfuncionamientos de anoche (por el sábado) y sacar lecciones para los eventos deportivos", tal y como anunció el domingo la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, una de las asistentes de esta reunión, que se ha prolongado dos horas. También ha estado presente el ministro del Interior, Gérald Darmanin, y ambos han ofrecido una rueda de prensa en la que han denunciado que hubo "un fraude masivo, industrial y organizado de entradas falsas" por parte de los aficionados ingleses y han defendido que las que las fuerzas del orden evitaron un drama mucho mayor.
"Entre 30.000 y 40.000 aficionados ingleses se presentaron sin entradas o con entradas falsas", ha señalado Darmanin, que ha destacado que en las gradas madridistas no se registraron problemas y que lo que complicó la situación fue "la desorganización de la llegada de los británicos al estadio", agravada por la huelga que había en una de las líneas de cercanías que llega hasta el Stade de France.
Según ha explicado, los hinchas ingleses se acumularon en una sola vía de acceso, por lo que la policía decidió disolver uno de los cordones de seguridad previos al estadio para aliviar la congestión. Sin embargo, esta medida favoreció a los jóvenes del barrio, franceses y migrantes, que se dedicaron a asaltar a los hinchas y a intentar colarse en el estadio. "Nos habíamos preparado mucho ante el hooliganismo", ha afirmado Darmanin. "Pero estábamos menos preparados para una delincuencia que se aprovechó del caos en los controles previos", ha añadido.
El ministro francés no ha profundizado en lo sucedido, pero ha asegurado que "no hubo ninguna divergencia en la interpretación" y que el dispositivo policial permitió "evitar muertos y heridos dentro del estadio".
Por su parte, la ministra de Deportes gala, Amélie Oudéa-Castéra, ha adelantado que la UEFA va a abrir una investigación para esclarecer las causas de lo ocurrido y que las autoridades francesas también abrirán una interna. Además, ha anunciado una indemnización para los 2.700 aficionados del Liverpool que no pudieron entrar al estadio pese a disponer de una entrada legal y ha salido al paso de todos aquellos que dudan de la capacidad de Francia para ser anfitrión de los próximos eventos deportivos que tiene por delante, el Mundial de rugby en 2023 y los Juegos de 2024.
"Somos capaces de organizar grandes eventos deportivos, lo hemos demostrado desde la Eurocopa 2016. No estoy preocupada, estoy comprometida con que aprendamos todas las lecciones de lo que sucedió el sábado por la noche para aprender de eso", ha asegurado Oudéa-Castéra.
La UEFA también ha confirmado que ha decidido iniciar una investigación sobre lo sucedido y que se llevará a cabo una revisión exhaustiva en la que se examinará "la toma de decisiones, la responsabilidad y comportamientos de todas las entidades involucradas en la final". Por el momento, lo cierto es que nadie asume responsabilidades y que las escenas de caos han traído a la memoria tragedias como las ocurridas en Heysel y Hillsborough, y han alimentado las tensiones entre Reino Unido y Francia, que viven una relación especialmente delicada desde que se consumó el Brexit.