La política centro africana tiene muchísimas variables que se nos escapan a los occidentales, y cuando en España sufrimos el seguidismo de fidelidad al partido, allí tiene mucha más importancia la familia o la tribu a la que perteneces.
Como ya informábamos en un anterior artículo, Baltasar Ebang Engonga, sobrino del presidente de Guinea Ecuatorial (excolonia española) Teodoro Obiang Nguema, guardaba videos de sus encuentros sexuales con mujeres e hijas de muchos de las principales figuras del régimen, desde generales a ministros, y a las que chantajeaba “como compensación para borrar del sistema los malos antecedentes fiscales de sus padres o maridos”... Una historia que de alguna manera recuerda al guión de Steven Soderbergh en "Sexo, mentiras y cintas de vídeo".
Y esto lo hacía porque Baltasar Ebang Engonga, apodado ‘El Bello’, era el director general de la Agencia Nacional de Investigación Financiera –la inspección de Hacienda de Guinea Ecuatorial- y al que ha sucedido Zenón Obiang Obiang Avomo (en Guinea Ecuatorial apellidarse Obiang o Nguema es sinónimo de llegar a ministro, general o director general).
¿Cómo se difundieron esos video íntimos del sobrino de Obiang?
La policía ecuatoguineana registró el domicilio del director de la Inspección Hacienda y ¿qué encuentra? Videos sexuales con mujeres e hijas de figuras régimen. ¿Y qué es lo siguiente que sucede? Que muchos de esos videos, todos no (hay un filtro interesado), salen publicados en redes sociales.
Esto sugiere, como además fuentes de servicios información de un país norteafricano confirman a Escudo Digital, que los que filtran parte de las cintas “son policías afines o pagados por el clan Ona Ondó”, un clan que no es ecuatoguineano sino gabonés y que nos hace preguntarnos qué objetivo podría tener un clan de Gabón en todo esto.
La respuesta a esta interrogante es que Baltasar Ebang Engonga es hijo de Baltasar Engonga Edjo’o, ministro de confianza del presidente, y cuando Baltasar Engonga fue nombrado director de la Comunidad Económica y Monetaria de África Central (Cemac), lo primero que este hizo fue una Auditoria sobre su antecesor, el gabonés Daniel Ona Ondó (ex primer ministro de Gabón en 2014) y apartar a toda su gente de confianza (por eso, cuando entre los videos los policías han encontrado algunos de su protagonista principal con Michi, esposa de Jesús Edu Moto, supervisor General de la Seguridad Presidencial, y figura conocida por sus métodos de represión, debieron llevarse la alegría del siglo al saber que acababan de condenar a muerte al “Bello”, quien ahora se encuentra bajo prisión preventiva en la cárcel de Black Beach en la capital, Malabo).
De conflicto entre familias tribales a asunto de Estado
Hasta aquí todo podría parecer un conflicto entre mafias y familias tribales centroafricanas, si no fuese porque en su guerra particular, utilizan las estructuras de estado de sus países y porque finalmente se ha convertido en un asunto de Estado que trasciende de sus fronteras cuando se descubre que en el fondo lo que hay es toda una pelea encubierta con formas políticas entre dos estados centroafricanos (Guinea Ecuatorial y Gabón) que luchan por revivir su producción de petróleo y consecuente por mantener sus respectivas mafias en el poder.
Una lucha que tiene como origen la pugna que mantienen Guinea Ecuatorial, que reclama la soberanía de Mbanie, junto a las islas de Cocotiers y Conga, y Gabón, que también la considera parte de su territorio. En 1970 Guinea Ecuatorial estaba en posesión de estas islas, pero en 1972 el ejército de Gabón expulsó a los soldados ecuatoguineanos de Mbanie y estableció su propia presencia militar en la isla. Entonces eran islas pobres y no merecía la pena el conflicto, pero hoy, según S&P Global, solo los proyectos petroleros cercanos a las costas superan los 31.000 barriles diarios de producción y tienen 749 millones de barriles recuperables.
Y los rivales de esta vieja y olvidada pugna, que ahora ha reverdecido al olor del petróleo, son el dictador de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema apoyado por Estados Unidos y Marruecos, y, del otro lado, el general Brice Oligui Nguema (otro Nguema), que tomó el poder mediante un golpe de Estado el 30 de agosto de 2023, y ahora apoyado por Rusia y su entorno (Argelia).
Y a todo esto, sus antiguas potencias colonizadoras (España y Francia) se encuentran al margen y sin enterarse de nada.