La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) quiere que los teléfonos de emergencia se regulen con mayor facilitad y no tengan ningún tipo de coste para los usuarios.
Por ello, la comisión ha propuesto al Gobierno a través de un informe que se cree una única norma en la que todas estas líneas sean incluidas y sus criterios estén unificados, como el de su gratuidad.
En un informe el organismo ha invitado al ejecutivo a unificar en el mismo texto los 061, 062, 080, 085, 088, 091, 092 y 1006 y valorar la extensión para dichos números de las obligaciones de gratuidad para el llamante, encaminamiento sin contraprestación para los operadores e información sobre la localización del llamante.
En otro informe la CNMC aboga por la creación de un sistema de alertas nacional si se producen catástrofes.
La institución quiere obtener un un listado de estos números para incorporarlo en la base de datos europeas, así como tener en cuenta las llamadas en situación de itinerancia.
Además, ha esgrimido que es necesario crear un un Centro de Recepción de Comunicaciones de Emergencia (CRCE) por provincia y uno por isla.
Alertas en menos de 10 segundos
Por otro lado, la Comisión ha valorado positivamente la elaboración de la normativa sobre el sistema de alertas para ciudadanos con antelación respecto a la fecha límite que había planteado la Unión Europea (julio de 2022), así como el uso de los estandares de la unión para su desarrollo.
En relación al texto, la CNMC sugiere que se cree un artículo por el cual los operadores estén obligados a transmitir la alerta en un intervalo a inferior a diez segundos en el caso de que se produzcan catástrofes inminentes, como terremotos o tsunamis.
Asimismo, se ha la doble emisión de las notificaciones enviadas a los teléfonos móviles y que las administraciones se coordinen para que las alertas se envíen en varios idiomas y así sean entendibles por los turistas o visitantes.