El Hospital Universitario de Zurich, ETH Zúrich, Wyss Zúrich y la Universidad de Zúrich han desarrollado y puesto en marcha la técnica denominada "perfusión normotérmica ex situ" que ha permitido trasplatar un higado humano considerado como no viable para el trasplante. El paciente, según detalla artículo científico publicado en la Revista Nature fue operado hace ya un año, y según se ha revelado, se encuentra bien. El hígado utilizado para salvarle la vida no estaba originalmente aprobado para trasplante, pero la máquina de perfusión, gracias a la aplicación de un cóctel constante de medicamentos, llevó el órgano a un estado viable. Durante varias semanas se le admnistraron inmunosupresores tras la operación, que ha sido un éxito.
“Nuestra terapia muestra que al tratar los hígados en la máquina de perfusión, es posible aliviar la falta de funcionamiento de los órganos humanos y salvar vidas”, ha manifestado Pierre-Alain Clavien, coautor del estudio y cirujano del Hospital Universitario de Zúrich en un comunicado de prensa que ha sido difundido por Gizmodo.
Aún es pronto para anunciar que la técnica está plenamente desarrollado, pero este avance médico es muy importante para que la cantidad de hígados disponibles para trasplante, lo que puede permitir que las cirugías se programen con días de antelación. Un hígado sano por lo general se obtiene de un donante que haya muerto recientemente, pero que no haya sufrido lesión hepática. El hígado sano se transporta en una solución salina refrigerada, que lo puede llegar a conservar como mucho hasta doce horas. En este caso, el hígado pudo conservarse durante tres días fura del cuerpo antes de que tuviera lugar el trasplante. Es la primera vez que ocurre algo así.
Hace dos años, el equipo de investigación de Liver4Life ya puso a prueba el sistema para mantener un hígado fuera del cuerpo una semana, como proceso previo a lo que harían después. El dispositivo de perfusión funciona de la siguiente manera: emula las funciones humanas, la máquina dota al hígado de un sustituto de la sangre conservado a temperatura corporal normal. El corazón es sustituido por una bomba, y los pulmones como un oxigenador; una máquina de diálisis hace las funciones de los riñones; y con unas infusiones de hormonas y nutrientes se imitan los intestinos y el páncreas.
El paciente que ha salvado su vida gracias a este hígado renovado con la máquina de perfusión, fue diagnosticado previamente con cirrosis avanzada, tenía cáncer, hipertensión portal severa y otras afecciones hepáticas de gravedad. Estaba en lista de espera y como no llegaba el hígado que esperaba de un donante accedió a someterse a este procedimiento experimental. Pudo abandonar el hospital solo unos días después de ser operado.“Estoy muy agradecido por el órgano que me salvó la vida, debido a mi tumor que progresa rápidamente, tenía pocas posibilidades de obtener un hígado de la lista de espera dentro de un período de tiempo razonable”, ha manifestado.