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Sucesos

Sara, la joven enfermera que falleció junto a su padre en un garaje inundado por la DANA

"Su partida deja un vacío irreparable, pero también una huella de amor que jamás se desvanecerá", afirma su familia.

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Sara Carpio, una de las al menos 217 personas fallecidas por la devastadora y trágica DANA | Foto: Colegio Oficial de Enfermería de Valencia (COENV)

La devastadora DANA que el pasado 29 de octubre arrasó varias regiones de España, teniendo su epicentro en Valencia, sigue sumando víctimas mortales pasados ocho días de la tragedia. En estos momentos, la cifra de fallecidos asciende a 217 –211 en la provincia de Valencia, cinco en Castilla-La Mancha y una en Andalucía–, pero aún hay 89 personas desaparecidas en Valencia, según el Centro de Integración de Datos (CID).

Entre las al menos 217 vidas truncadas, están las de Miguel y Sara Carpio, un padre y una hija residentes en Benetússer. Ambos fallecieron como tristemente muchas víctimas de la DANA, al ir a sacar sus coches del garaje, según hemos informado en Escudo Digital recogiendo una entrevista que ha concedido la madre y viuda de las víctimas, Toñi, en la que muestra su inconmensurable dolor y culpabiliza a los políticos por su "ineptitud".

Miguel, de 61 años, trabajaba como funcionario de la Generalitat, mientras que Sara era una una joven enfermera de 24 años.

Sara, una "enfermera y persona excepcional"

El Colegio Oficial de Enfermería de Valencia (COENV) y la Escuela de Enfermería La Fe han expresado en un sentido comunicado su "más profundo dolor y tristeza por la trágica pérdida de nuestra compañera Sara Carpio García", de la que aseguran era una "enfermera y persona excepcional".

"Su fallecimiento, junto al de su padre, en la inundación de su garaje, deja consternada a toda la comunidad sanitaria ya quienes tuvieron el privilegio de conocerla". "La partida de Sara representa una pérdida irreparable para la enfermería valenciana y para todos aquellos que comparten el compromiso de servir a los demás desde la vocación de cuidar", señalan ambas instituciones.

Además, destacan que, en su faceta como enfermera, Sara "fue un modelo de entrega" y atesoraba un compromiso hacia los demás que ahora es "una inspiración para todos nosotros. Su memoria será honrada y su espíritu de servicio seguirá vivo en nuestra labor diaria".

"Su partida deja un vacío irreparable, pero también una huella de amor que jamás se desvanecerá".

Desde el COENV y la Escuela de Enfermería La Fe trasladan "su más sincero pésame a la familia de Sara en estos momentos de gran tristeza" y se ponen a su disposición para prestarles su apoyo en "todo lo que puedan necesitar".

Los familiares de Sara, por su parte, han compartido con las instituciones este emotivo y escueto en el que recuerdan la bondad, generosidad y fuerza de su ser querido. "La vida de Sara fue un ejemplo de amor, generosidad y fortaleza. Su partida deja un vacío irreparable, pero también una huella de amor que jamás se desvanecerá. Tu familia nunca te olvidará".

Llamamiento a extremar las precauciones ante fenómenos climáticos

En el comunicado, el COENV también hace un llamamiento tanto a las autoridades como al conjunto de la ciudadanía para que se extremen las precauciones ante fenómenos climáticos "cada vez más intensos y frecuentes".

"La protección de la vida debe ser siempre la prioridad, y esta tragedia nos recuerda la importancia de adoptar medidas de prevención y de concienciación en situaciones de emergencia. Seguiremos trabajando por la seguridad de todos nuestros profesionales de enfermería y por promover la responsabilidad en situaciones de riesgo", subraya el COENV, que remata el comunicado reiterando su "compromiso de recordar y honrar a Sara Carpio García".

"Su legado perdurará en nuestros corazones y en la comunidad de enfermería que tanto la valoraba. Descanse en paz", apunta.