El Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA), centro de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se encuentra al frente del proyecto de investigación DTWINE2021, una iniciativa que busca aplicar y consolidar la tecnología de los gemelos digitales en el sector del vino con dos objetivos concretos: lograr una producción más sostenible y ofrecer una respuesta satisfactoria a las nuevas tendencias de consumo de vinos. Cotizan al alza los que tienen menor graduación alcohólica y perfiles aromáticos ricos.
El proyecto, según informa Europa Press, prevé el desarrollo de gemelos digitales, el monitoreo avanzado y la aplicación de algoritmos de control predictivo de modelos para apoyar a los enólogos en sus trabajos.
Además del Grupo de Biología de Sistemas en Levaduras de Interés Biotecnológico del IATA, liderado por la investigadora Amparo Querol, también participan en el trabajo Bodegas Ramón Bilbao, el Grupo de Biosistemas e Ingeniería de bioprocesos del Instituto de Investigaciones Marinas (IIM, CSIC) y la empresa Instalación y Control de Energía y Fluidos (INCONEF).
Un gemelo digital es un programa de ordenador que permite simular y predecir el comportamiento de un sistema real y para ello utiliza modelos matemáticos. En el sector vitivinícola, el gemelo digital permitirá simular y predecir el proceso de fermentación vínica.
Además, combinado con sensores y métodos computacionales de optimización, facilitará la labor de los enólogos en la toma de decisiones en la operación diaria en las bodegas.
El Presupuesto del proyecto DTWINE
El proyecto de investigación de líneas estratégicas DTWINE persigue introducir y consolidar el uso de gemelos digitales en el sector vitivinícola. Cuenta con un presupuesto de 1.001.848 euros y está financiado por la Agencia Estatal de Investigación (AEI), perteneciente al Ministerio de Ciencia e Innovación, con fondos Next Generation EU, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Está previsto que sus trabajos se desarrollen a lo largo de los 36 meses comprendidos entre octubre de 2021 y septiembre de 2024. El trabajo se ejecutará en cuatro zonas vitivinícolas representativas del sector vitivinícola español: La Rioja, País Vasco (Rioja Alavesa), Galicia y Comunitat Valenciana.