"La Justicia es uno de los pilares del Estado de Derecho y debe adaptarse a la evolución de la sociedad, proporcionando un servicio más accesible, siendo más comprensible y cercana al ciudadano". Así lo asegura Minsait, compañía de Indra, que ha destacado el valor de las personas en la transformación de la Justicia y ha apelado a la necesidad de rodearse de diversas tecnologías como la automatización, el análisis de datos, la ciberseguridad o la inteligencia artificial para evolucionar la Administración Judicial hacia una organización orientada al dato, que reduzca el volumen de documentos y sea más resiliente, sostenible y cercana a la ciudadanía.
Según Miguel Ángel de la Pisa, responsable del Centro de Excelencia en Justicia de Minsait, la sociedad "demanda mayor proximidad y transparencia" por parte de este servicio público y "es imprescindible situar en el centro de su transformación a las personas, ya que son la palanca necesaria para lograr evolucionar con resultados satisfactorios".
Este enfoque incluye por tanto a trabajadores de la Administración y a ciudadanos, destinatarios finales del servicio. Para Minsait, que acaba de publicar el informe "Transformación Digital en la Administración de Justicia. Innovación y Modernización", es fundamental incentivar la formación y capacitación de los profesionales del Servicio Público de Justicia para incrementar sus competencias digitales y ayudarles a mejorar el desempeño de su actividad, que constituye un impacto "directo en la eficiencia y eficacia del servicio, así como en la calidad de los datos y la productividad".
Del mismo modo, la compañía sostiene que la ciudadanía debe contar con un acceso que reduzca su posible brecha digital y recursos que le permitan mantener una relación directa, telemática y eficaz, en caso necesario, con la Administración de Justicia.
Las tecnologías por las que apuesta para mejorar los procesos y resultados
En la evolución del Sistema Judicial, Minsait visualiza la creación de un Ecosistema Digital Integrado de Justicia que comparte datos entre los diferentes sistemas y fuentes de información, tanto externas como internas a la Administración, mediante la utilización intensiva de tecnología Big Data. En este contexto, señala que también adquirirá un gran valor la analítica de datos, puesto que facilitará la extracción de valor en el tratamiento de esa información. "La tecnología actual permite evolucionar hacia sistemas que nos pueden aportar predictibilidad sobre escenarios futuros, con un alto grado de acierto a partir de la identificación de patrones, modelos o tendencias", subraya Miguel Ángel de la Pisa.
Igualmente, la empresa de Indra apuesta por una Automatización Judicial Inteligente en la que tecnologías como la automatización o la inteligencia artificial sean el medio para agilizar procedimientos judiciales, reducir errores y costes, así como para extender la disponibilidad y optimizar los recursos, consiguiendo así emplear de forma más eficiente a los profesionales y potenciar sus capacidades.
Además, Minsait prevé que técnicas como el Procesamiento del Lenguaje Natural y la Minería de Datos se convertirán en el recurso más solvente para la obtención de información a partir de los millones de documentos disponibles en el Servicio Público de Justicia. En este sentido, considera que su combinación permitirá crear herramientas que sirvan de apoyo en la toma de decisiones de jueces y juezas, fiscales y cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia.
Por otra parte, la firma está convencida de que la ciberseguridad debe ser un elemento transversal a la digitalización, más aún en un servicio tan estratégico para la sociedad como es la Justicia. "El objetivo es asegurar a las personas, las infraestructuras, la información y el propio Servicio Público de Justicia su protección de posibles ciberataques, con el fin de garantizar su estabilidad y continuidad", sentencia el responsable del equipo del Centro de Excelencia de Justicia de Minsait.
La compañía de Indra lleva más de 35 años trabajando con las administraciones, ha desarrollado más de 100 proyectos de modernización de justicia en 15 países e instalado sus sistemas de información en más de 10.000 órganos judiciales. En España es un referente en el desarrollo de sistemas de gestión judicial y prestación de servicios, tanto en la administración central como autonómica. Además, actualmente cuenta con tecnologías que contribuyen a disminuir significativamente los tiempos de tramitación de las causas judiciales y sus soluciones han hecho posible un descenso de más del 15% en las quejas, reclamaciones y sugerencias de los usuarios de la justicia; reducciones del 60% en los desplazamientos de profesionales a los juzgados o del 53% en el número de horas que los funcionarios dedican a los trámites de interoperabilidad o intercambio de información entre los distintos sistemas involucrados en la administración de justicia.