China es el país más optimista del mundo respecto a la evolución futura de la Inteligencia Artificial, seguido de Arabia Saudí, India y Perú. En el lado opuesto se encuentran varios países occidentales, encabezados por Francia, el más pesimista de todos ellos, y Canadá, Holanda y Estados Unidos.
Según una encuesta encargada por el Foro Económico Mundial de Davos que recoge France-Press, el 78% de los chinos creen que la Inteligencia Artificial "aportará más beneficios que inconvenientes".
Según Henri Wallard, director general delegado de la encuestadora Ipsos, ciertas medidas en China demuestran que la inteligencia artificial “ya es algo familiar" y que sus habitantes "tienen la sensación de comprenderla y entender sus beneficios". Por el contrario, en los países occidentales la población "se considera menos familiarizada" y expresa "menos confianza" ante esas cuestiones.
La mayoría de encuestados en el mundo considera que la inteligencia artificial aportará mejoras en el campo de la educación y de formación profesional en nuevos sectores (77%), seguido del sector de entretenimiento y los transportes.
En el lado opuesto, solamente el 37% de los que participaron en el estudio cree que la inteligencia artificial beneficiará sus libertades o derechos, mientras que únicamente el 47% considera que mejorará su situación laboral.
En líneas generales, los países occidentales tienden a tener una visión más pesimista de la inteligencia artificial que las potencias emergentes. El 80% de los peruanos creen que la inteligencia artificial mejorará la vida de su familia, en comparación con el 41% de los belgas, los menos entusiastas.
El sondeo fue realizado en 28 países, con una muestra de 1.000 personas en China y otros 10 países, y 500 personas en el caso de Perú, India y otros 15 países.