El 90,56% de los españoles cree que la inteligencia artificial (IA) supondrá la pérdida de empleo en los próximos años, pero se ve también como una tecnología de futuro, aunque con un impacto del beneficio desigual, en favor de emprendedores y funcionarios.
La irrupción de la IA genera inquietud por la posible destrucción de empleo y esperanza por las oportunidades que representa, como se recoge en el Observatorio Hostinger sobre la Transformación Digital 2025.
Las opiniones en torno a la destrucción se dividen respecto al alcance del impacto: el 44,56% cree que afectará a muchos trabajadores, frente al 46% que considera que solo perjudicará a algunos sectores.
Nuevas oportunidades
Solo el 9,44% considera que los trabajadores se beneficiarán directamente de esta tecnología. La rapidez con la que evoluciona esta tecnología hace que el 30% de los encuestados no tenga claro si será una amenaza o no.
"Aunque la inteligencia artificial pueda generar preocupaciones razonables, lo más importante es comprender que su rápida expansión está abriendo una infinidad de nuevas oportunidades", afirma el responsable de Hostinger para España e Italia, Walter Guido, en una nota de prensa. Sin embargo, los encuestados comparten la percepción de un reparto desigual de los beneficios de esta tecnología: prioriza la eficiencia empresarial frente al bienestar laboral.
Según el informe, el 42,44% de los españoles cree que los principales beneficiados serán los emprendedores, seguidos de los funcionarios (28,44%). En cambio, los trabajadores por cuenta ajena (17,67%) y los autónomos (11,44%) aparecen como los grupos con menor capacidad para aprovechar las ventajas de la IA.
Para recomendaciones de compra
El 37,8% ya utiliza la IA para recibir recomendaciones de compra, y un 22,4% prefiere interactuar con chatbots para resolver dudas en servicios de atención al cliente. Sin embargo, la confianza se reduce en ámbitos sensibles: solo un 6,33% confiaría en un sistema de IA para recibir un diagnóstico médico básico.
Asimismo, el 33,4% de los encuestados evita utilizar inteligencia artificial y prefiere interactuar exclusivamente con humanos. No obstante, la mayoría de los encuestados, 82,8%, cree que nunca es demasiado tarde para empezar a usar tecnologías de inteligencia artificial.