En ‘Years and Years’, la impactante serie de la BBC que predice un futuro no tan lejano, hablaban de los árbitros como una de las profesiones que ya había desaparecido mediados los años 20. Es uno de los muchos aciertos de la serie. Y, aunque su ausencia no será inmediata en 2021, los últimos avances en tecnologías como inteligencia artificial hacen prever que su aportación no será tan relevante como lo ha sido en el último siglo.
La FiFA aplica ya IA para determinar el fuera de juego en el fútbol y ahora es la gimnasia artística la que se vale de esta tecnología para puntuar los ejercicios de los atletas en pruebas como los Juegos Olímpicos. Un sistema que se ha probado ya en los Campeonatos del Mundo de 2019 y estará en pleno funcionamiento en los JJ.OO. de París 2024.
El sistema ha sido desarrollado por la compañía Fujitsu y, aunque no sustituye al árbitro, lo condena a un papel poco relevante, en uno de los deportes más polémicos que existen. En gimnasia, como ocurre en saltos de trampolín y algunas otras disciplinas, las medallas se deciden por un jurado, que otorga una puntuación a los ejercicios desarrollados por los gimnastas.
A pesar de que se basan en parámetros como la dificultad y la ejecución, se trata de uno de los deportes más subjetivos que existen. No gana el más rápido, ni el más fuerte, ni el que más puntos haga, sino el que decide un grupo de personas. Ahora se quiere poner coto a su protagonismo con una herramienta que ayudará a calcular el valor de dificultad de los elementos que ejecute el gimnasta.
Cómo funciona
El funcionamiento de este sistema desarrollado por los ingenieros de la firma japonesa está basado en la tecnología de inteligencia artificial de detección 3D. Una cámara equipada con un sensor 3D capta los movimientos de un gimnasta y transmite las imágenes y los datos a un ordenador que proyecta una imagen gráfica en tres dimensiones de su actuación.
Estos datos posteriormente son analizados por la inteligencia artificial, que tiene en cuenta la postura del gimnasta, su posición en relación con el aparato y el tipo de movimiento para determinar el elemento que está realizando.
Junto al análisis que se realiza desde todos los ángulos de la actuación del deportista, el programa diseñado por Fujitsu proporciona una serie de datos numéricos, como el ángulo preciso del cuerpo de un gimnasta cuando sostiene un elemento de fuerza en las anillas o ejecuta un salto en la barra de equilibrio. Actualmente el sistema ya reconoce más de 800 elementos en gimnasia artística masculina y más de 500 en la femenina.
IA para el entrenamiento
Otra de las posibilidades de esta herramienta es que los propios gimnastas o sus entrenadores podrán usarla para crear nuevos elementos que luego presentarán en competición o para corregir errores en la ejecución de sus ejercicios. También está abierta a cualquier persona interesada en mejorar su salud.
Para emplearla, los usuarios adoptan cinco posturas diferentes indicadas por la aplicación frente a una cámara web. Posteriormente, la IA aplica un "esqueleto" a los datos corporales que capta y mide la flexibilidad y la amplitud de movimiento de cada parte del cuerpo, especialmente la de la zona de la cadera. Por último, IA evalúa los datos medidos y sugiere a los usuarios ejercicios personalizados para mejorar su salud.
Las posturas, el modelo de evaluación y los ejercicios utilizados por la aplicación se basan en los resultados de las investigaciones científicas sobre el deporte del profesor Koji Kaneoka, de la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de Waseda.