Actualmente, hay más de 2,4 millones de robots industriales en las fábricas de todo el mundo y se prevé que esta cifra va a alcanzar los cuatro millones en el año 2022. Este notable incremento es sin duda una buena noticia para la economía, especialmente para la recuperación económica en la era post-coronavirus, ya que los robots industriales tienen un papel fundamental en el avance de la automatización en la fabricación. Y, gracias a esto, también aumenta la demanda de mano de obra cualificada.
"Los gobiernos y las empresas de todo el mundo deben centrarse en proporcionar las habilidades necesarias relacionadas con los robots y los sistemas de automatización inteligentes", afirma Milton Guerry, presidente de la International Federation of Robotics, desde donde se alerta de que la economía necesita urgentemente especialización en robótica.
"La recuperación económica de la era post-coronavirus aumentará la demanda en robótica. Se necesitan estrategias políticas y del sector privado para facilitar el camino a una economía más automatizada para los trabajadores y trabajadoras", ha añadido.
Los sistemas educativos en la era de la automatización
"Hoy, muy pocos países están adaptando de forma activa sus sistemas educativos a la era de la automatización", asegura Saadia Zahidi, responsable de las iniciativas de educación, género y empleo en el Foro Económico Mundial. "Los estados más prósperos se centran desde hace tiempo en el desarrollo del capital humano. Algunos países del norte de Europa y Singapur están realizando los experimentos probablemente más útiles para adaptarse al mundo laboral del futuro".
El ejemplo de Corea del Sur, Estonia, Singapur y Alemania
De acuerdo al "Índice de preparación para la automatización", publicado por The Economist Intelligence Unit (EIU), solo cuatro países del mundo cuentan con una política educativa totalmente desarrollada que responde a los desafíos de una economía automatizada. Corea del Sur lidera esta clasificación y le siguen Estonia, Singapur y Alemania. Países como Japón, Estados Unidos y Francia están clasificados como desarrollados mientras que China todavía se considera un país emergente.
Cambio de la política de contratación
Una de las medidas que deben tomar las empresas a corto plazo es contemplar un cambio de la política de contratación: "Si no se pueden encontrar trabajadores con experiencia, hay que centrarse en la cualificación de los y las solicitantes en lugar de en su titulación", aconsejó el Dr. Byron Clayton, director ejecutivo de Advanced Robotics for Manufacturing (ARM), en la mesa redonda de IFR en Chicago. "Debemos centrarnos en el potencial. Si no hay personas con experiencia, tendremos que contratar a aquellas que puedan aprender a realizar el trabajo".
Apoyo a la formación y a la especialización
Los fabricantes de robots ya están apoyando la formación y la especialización en robótica con una capacitación práctica. "El reciclaje profesional de los trabajadores es solo una medida a corto plazo. Tenemos que empezar mucho antes: los planes de estudios de los centros y la formación deben adaptarse a la demanda de la industria de mano de obra para el futuro. Por un lado, se necesitan habilidades técnicas y digitales, pero también son importantes las habilidades cognitivas, la capacidad para resolver problemas y el pensamiento crítico", explica la Dra. Susanne Bieller, secretaria general de la International Federation of Robotics. "Las economías de los distintos países deben adoptar la automatización y desarrollar las habilidades necesarias para hacerlo. Solo así será posible beneficiarse de las ventajas de la tecnología y no quedarse atrás en la competencia internacional".