Microsoft ha publicado una investigación denominada Encuesta Global de Seguridad Online 2023: Percepciones de padres e hijos sobre la seguridad en la Red, basada en un sondeo realizado en la web, en el que participaron más de 16.000 padres, niños y adolescentes de entre 6 y 17 años, y otros adultos, de 16 países de diferentes puntos del globo.
El estudio reveló que el 69% de las personas encuestadas ha experimentado algún tipo de riesgo en línea en el último año. Entre estos se destacan:
- la información errónea o fake news y la desinformación, en un 51% de los casos,
- el ciberacoso, los discursos de odio y las amenazas de violencia, 42%,
- violencia explícita y terrorismo, 39%,
- sexo, abuso y publicación de imágenes íntimas (incluyendo la explotación infantil), 25%,
- suicidio y autolesión, 15% .
Los adolescentes, más expuestos de lo que sus padres imaginan
Si hacemos foco en los adolescentes, el 74% asegura haber sufrido riesgos al navegar por Internet, mientras que el 62% de los padres cree que su hijo adolescente se ha encontrado con algún peligro en línea, lo que representa una diferencia de 12 puntos.
La investigación también encontró que los padres no solo subestiman los riesgos, sino que lo hacen en todas las categorías consultadas. Se hallaron mayores diferencias de percepción parental en las amenazas vinculadas a los discursos de odio, a la violencia, a la exposición al suicidio y la autolesión, y al acoso cibernético y el abuso.
Para apreciarlo concretamente, se observa que mientras que el 39% de los adolescentes declaró haber sido víctima de incitación al odio en Internet, sólo el 29% de los padres respondieron en la encuesta que su hijo tuvo alguna experiencia de ese tipo. Lo mismo sucede con las amenazas de violencia: los adolescentes reportaron un 19% de estos hechos, mientras que los padres sólo un 11%.
Sólo un 62% de los padres cree que sus hijos adolescentes se han encontrado con peligros por navegar en Internet.
Qué hacen los padres para preservar la seguridad de sus hijos
Con respecto a las medidas que toman los adultos para proteger a los niños en el uso de Internet y redes sociales, entre el 80 y el 90% de los encuestados asegura que realiza alguna acción, como por ejemplo comprobar los perfiles y las publicaciones de sus hijos, recibir informes de actividad y hablar regularmente con ellos sobre sus actividades en la Red, aunque los padres de niños de entre 6 y 12 años son más propensos que los de adolescentes a utilizar herramientas de seguridad basadas en plataformas (un 4,4% frente a un 3,5%).
En cuanto a las estrategias que se utilizan, los progenitores consideran que las más eficaces son las que les permiten revisar las solicitudes de amigos/seguidores (71%) y limitar los gastos online (69%). Pero también aparecen otros recursos como la creación de cuentas específicas para niños, los bloqueadores de contenidos explícitos, y acciones como el límite de tiempo frente a las pantallas, y la revisión regular de las aplicaciones, juegos y redes sociales que sus hijos utilizan.
Resulta llamativo también que entre los adultos que aún no han utilizado ninguna herramienta de protección para sus hijos adolescentes, el 60% considera que eso no es necesario. Y aquí es importante volver a un dato ya mencionado en estas líneas: el 74% de los adolescentes encuestados asegura que ha experimentado algún riesgo en sus actividades en línea.
Luego, del total de adolescentes que se ha sentido expuesto a algún peligro, sólo el 60% lo ha conversado con alguien. Y entre ellos, el 71% hablaron con sus padres; el 32% habló con amigos; y el 14% habló con otro adulto que no era su padre. Pero surge también la pregunta sobre qué sucede con ese 40% que no ha comentado estas situaciones, que, como mínimo, han sido incómodas para ellos. Puede que sea por timidez, por miedo a alguna represalia en el uso de la red o por subestimar el hecho, pero aquí ya caminamos en el terreno de la especulación.
Las diferencias por género entre los adolescentes
El estudio realizado por Microsoft pone de manifiesto también que no es lo mismo para un varón, para una chica o para un adolescente LGBTQ+ la seguridad en la navegación por la web y su entorno. En primer lugar, porque entre los encuestados de este último grupo asciende a 80% (contra 74%) la experiencia de algún tipo de peligro al conectarse a Internet.
Luego, mientras que los chicos experimentan más riesgos vinculados a los contenidos terroristas o extremos (15%) y a la violencia explícita (31%), las chicas se ven más expuestas a solicitudes sexuales (19%) y contenidos relacionados al suicidio y la autolesión (20%).
Y desde otra perspectiva, los adolescentes LGBTQ+ han indicado sentirse expuestos a solicitudes sexuales y a contenidos relacionados al suicidio o la autolesión en un 30%, mientras que los jóvenes que se identifican como binarios (varones y mujeres, en su conjunto) han manifestado un 13% de exposición a esos contenidos.
Desde Microsoft consideran que la seguridad digital se sostiene en cuatro pilares: la arquitectura de plataforma, la moderación de contenido, la cultura y la colaboración. “Capacitar a los usuarios para crear comunidades online seguras e integradoras permite a todos participar de forma más plena en los entornos digitales. Para lograrlo, hay que ayudar a las personas a comprender los riesgos a los que pueden enfrentarse en Internet y las formas en que pueden protegerse a sí mismas y a sus familias”, señala Courtney Gregoire, Jefa de Seguridad Digital de la compañía.
Por eso Microsoft ofrecen algunas herramientas para colaborar con la seguridad de los usuarios y sus familias que están disponibles en la web, como Recursos de Seguridad en línea para diferentes edades, Protección infantil y Aplicación Control parental de Xbox, entre otras opciones.