Este fin de semana Albania ha experimentado un potente ciberataque que ha apuntado contra activos digitales de sus instituciones y organismos públicos.
La Agencia Nacional para la Sociedad de la Información del país (AKSHI) ha sido quien lo ha anunciado. Este organismo, del que dependen muchos servicios, ha comunicado como sus principales servidores estaban caídos.
A causa de la amenaza Albania ha decidido cerrar sus servicios online y sistemas gubernamentales con el fin de evitar daños mayores y para la "neutralización de estos actos delictivos".
Este apagón ha afectado a un sinfín de servicios ciudadanos, que van desde obtener un nuevo ISBN para publicar un nuevo libro a inscribirse en un colegio.
Una amenaza exterior
Según la citada agencia, el sofisticado ataque al sistema de información proviene de fuera de Albania. No obstante, no se han proporcionado muchos más datos sobre su procedencia.
El Consejo de Ministros de Albania a través de un comunicado de prensa ha afirmado que están bajo un "ciberataque masivo que nunca antes había sucedido".
La institución ha realizado un llamamiento a los ciudadanos, los medios de comunicación y las empresas y otros actores para crear conciencia con el fin de parar este ataque "a los intereses nacionales albaneses".
Para hacer frente a la amenaza y evitar que el ciberataque dañe o perjudique a los sistemas de información albaneses el país está contando con Microsoft, Jones Group International y otras empresas TIC locales, quienes están investigando lo sucedido y ofreciendo una respuesta al incidente.
Algunos medios de comunicación albaneses han culpado a Rusia del ataque. Por su parte, Sali Berisha, ex primer ministro y líder en la oposición, ha culpado al gobierno por su ineptitud y ha criticado que este había concentrado demasiados servicios en la AKSHI.