Un nuevo ataque de ransomware ha puesto patas arriba al sector sanitario en EE.UU. En esta ocasión los actores de amenazas han apuntado contra OneBlood, un centro de donación de sangre sin ánimo de lucro con sede en Orlando que presta servicio a más de 350 hospitales en cuatro estados.
OneBlood está trabajando mano a mano con especialistas en ciberseguridad, así como con autoridades federales, estatales y locales, para dar una "respuesta integral" al incidente.
Aunque los centros de donación siguen recolectando, analizando y distribuyendo sangre, la organización ha comentado que "están operando a una capacidad significativamente reducida".
No obstante, el centro está llevando a cabo las operaciones y los procedimientos de manera manual, en la medida en que le es posible. Esto incluiría el etiquetado de las muestras de sangre donadas.
"OneBlood se toma muy en serio la seguridad de su red. Nuestro equipo reaccionó rápidamente para evaluar nuestros sistemas y comenzó una investigación para confirmar la naturaleza y el alcance completos del incidente", ha manifestado Susan Forbes, vicepresidenta sénior de comunicaciones corporativas y relaciones públicas de OneBlood, en un comunicado.
"Nuestras iniciativas de respuesta integrales están en curso y estamos trabajando diligentemente para restablecer la funcionalidad completa de nuestros sistemas lo más rápidamente posible", ha añadido.
Medidas extraordinarias
Forbes ha explicado que han pedido a los centros hospitalarios a los que prestan servicio que activen sus protocolos de escasez crítica de sangre y permanezcan en ese estado por el momento.
"No se puede dar por sentado el suministro de sangre. La situación a la que nos enfrentamos sigue vigente. Si usted es elegible para donar, le instamos a que solicite una cita para donar lo antes posible", ha indicado.
One Blood, además, se ha asociado con otros centros de donación de sangre de todo EE.UU. y ha creado un grupo de trabajo nacional para desastres que enviará sangre, plaquetas y otros productos sanguíneos adicionales.
En abril otro ataque de ransomware en EE.UU llevó al cierre de 150 centros de donación de plasma.