La Comunidad de Madrid se posiciona como un pequeño y próspero país con cerca de 262.000 millones de euros de PIB, una cifra equivalente a la de Portugal y superior a países de la UE y la OTAN como Hungría y Grecia. En Portugal, en cuestiones de ciberseguridad cuentan con el Centro Nacional de Cibersegurança (CNCS), un organismo similar a la Agencia de Ciberseguridad de la Comunidad de Madrid, que no deja de buscar personal e incrementar sus recursos.
En 2023, la agencia madrileña detectó y neutralizó un total de 72.712 ciberataques en 2023, un 18,6% más con respecto a los 61.280 del ejercicio anterior. Estos 72.712 ciberataques corresponden únicamente a los sufridos por la Administración, es decir, no incluyen a los que han afectado a organizaciones públicas que cuentan con servicios propios fuera de las competencias de Madrid Digital, como el Servicio de Emergencias 112, Metro, Asamblea de Madrid, Canal de Isabel II, o las empresas privadas.
Además, la capital alberga algunos de los centros de ciberseguridad más relevantes de España y Europa. Y ahora busca coordinar esfuerzos y reforzar el intercambio de información entre entidades públicas y privadas.
Otras comunidades como Cataluña, País Vasco o Andalucía también disponen de sus propias agencias de ciberseguridad. Sin embargo, a nivel nacional, el Gobierno acumula un considerable retraso en la creación de una Agencia Nacional de Ciberseguridad que coordine los esfuerzos de las autonomías.
Una lucha de poder por la ciberseguridad
Según nos cuentan diversas fuentes del ámbito de la ciberseguridad, el principal obstáculo para la fundación de esta agencia es la disputa que se está librando dentro del propio Gobierno. "Hay un fuerte pulso entre el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por ver quien dirige esta agencia", nos explican.
El INCIBE, entidad dependiente del Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública que dirige Óscar López, defiende que la creación de la agencia debería recaer bajo su competencia dada su responsabilidad en la sociedad de la información, la digitalización, así como en el desarrollo e impulso de la inteligencia artificial. Además, se percibe un interés del propio presidente por engrandecer la figura de López, especialmente frente a Isabel Díaz Ayuso después de que haya sido nombrado nuevo secretario general del PSOE de Madrid, en sustitución de Juan Lobato. El CNI, por su parte, sostiene con contundencia el argumento de que ya nos encontramos inmersos en una guerra híbrida y que es Defensa el ministerio que está al frente de esta cuestión.
Ciberamenazas crecientes, con España en la mira
Desde el inicio de la guerra de Ucrania, Europa está sufriendo cada año incrementos brutales de ciberataques dirigidos a poner a prueba su ciberresiliencia (la digitalización del sector público europeo es de las mayores del mundo) y a castigar su apoyo a Kiev frente a la invasión rusa.
El "Informe de Ciberamenazas y Tendencias 2024", elaborado por el Centro Criptológico Nacional (CCN) –dependiente del CNI–, concluía que los actores estatales, los grupos hacktivistas y los grupos cibercriminales son responsables de la mayoría de los ciberataques registrados tanto en España como a nivel internacional.
Según este informe del CCN, "la gran mayoría de la actividad hacktivista registrada en 2023 ha estado vinculada a dos conflictos armados activos: el conflicto rusoucraniano y el conflicto Israel-Hamás". Además, se han identificado campañas de ciberespionaje y ciberataques que han sido orquestados desde Rusia, China y Corea del Norte, y que han tenido a España como objetivo.