Las autoridades colombianas han concluido una operación policial que ha resultado en la detención de unos de sus mayores ciberdelincuentes.
El hacker Fabio Molina sería, presuntamente, el núcleo de una red que tenía por objetivos entidades y personalidades de toda Colombia.
Según ha comunicado el director de la Policía Nacional de Colombia, el general Jorge Luis Vargas, Molina harbía intervenido "más de 400.000 correos de entidades, funcionarios y ciudadanos para obtener y controlar información, pero al mismo tiempo para lucrarse mediante maniobras engañosas suplantando a varias instituciones del Estado".
Además, también habría accedido a 1,2 millones de páginas web, portales y direcciones IP. Esta amplitud de miras habría hecho que la policía colombiana incluso pusiera el asunto en manos de la Interpol para abrir una investigación internacional.
Vargas también ha revelado que se habrían detectado "1.500 muestras de malware, 116 actividades hacia entidades gubernamentales de primer orden, 240 víctimas nuevas que estaban preparando y 22 dispositivos electrónicos encontrados", convirtiéndose en una de las mayores operaciones en la historia de la ciberseguridad en Colombia.
El hacker operaba mediante RAT o troyanos de acceso remoto, un tipo de malware que lleva a cabo una vigilancia encubierta desde una ubicación remota. Enviaba correos que inducían al error para que las víctimas descargaran archivos adjuntos maliciosos y así infectar sus dispositivos y equipos.
Una vez infectados Molina y su red podían conseguir emails, imágenes, bases de datos y contraseñas de todo tipo, según informa El Tiempo.
Miles de correos oficiales intervenidos
Así, la policía ha encontrado que los cibermalos pudieron acceder a 420.000 correos, de los cuales había más de 2.700 que correspondían a funcionarios de organismos gubernamentales. 116 de ellos incluso pertenecían a personas asociadas a la Presidencia de la República.
El ciberdelincuente se enfrenta a cargos por uso de software malicioso, violación de datos personales, acceso abusivo a sistema informático y concierto para delinquir.
Las fuerzas del orden del país llevaban tras el cibermalo cerca de tres años. La investigación se inició en 2019, cuando una funcionaria de la Presidencia de la República fue destinataria de un email malicioso que trataba de suplantar a la Fiscalía y el cual contenía una citación a un proceso penal, que obviamente, no existía.
En 2021 se registraron en Colombia más de 48.000 denuncias por delitos cibernéticos . El CAI Virtual de la Policía ha compartido que en una sola jornada, el sector Defensa procesa 128 millones de registros de interacciones cibernéticas y son bloqueados 150.000 eventos maliciosos.
El año pasado fueron bloqueadas en el país 18.578 URL por incluir contenido malicioso.