La sextorsión es una forma de chantaje en la cual alguien amenaza a otra persona con revelar información o imágenes sexuales comprometedoras de su persona, a menos que se cumplan ciertas demandas, generalmente de carácter sexual o económica. ¿Y en qué consiste la sextorsión hecha mediante inteligencia artificial (IA)? Cuando hablamos de este tipo de chantaje, nos referimos al uso de algoritmos y tecnologías de IA para llevar a cabo la coacción. Esto se traduce en que se crean imágenes falsas o se manipulan imágenes reales para crear fotografías de contenido íntimo con las que luego se amenaza a la víctima con difundirlas a no ser que se pague un dinero o se den favores sexuales (o se aporte contenido visual o audiovisual de carácter erótico o sexual) a cambio de no divulgarlas. Esta forma de sextorsión puede incluir también el uso de chatbots o programas de IA que interactúan con la víctima y simulan ser una persona real, con el fin de obtener imágenes o información personal comprometedora. Estos programas suelen ser concebidos para engañar a las personas y manipularlas emocionalmente, aprovechando sus vulnerabilidades y deseos.
El FBI ha alertado en el pasado mes de junio de este 2023 sobre el uso creciente de inteligencia artificial para generar videos falsos, que luego se emplean en prácticas de sextorsión con las que se intentan acosar a menores y adultos para obligarlos a pagar rescates o cumplir con otras demandas.
Qué es la sextorsión y cómo se articula por parte de los ciberdelincuentes
Sea como fuere, la lacra de la sextorsión existe desde hace décadas. Se trata de un chantaje realizado por un conocido (o un extraño) a través de Internet que engaña a una persona para que le proporcione un pago, una foto explícita o que insta a esa persona a mantener algún tipo de encuentro sexual o alguna actividad parecida. El eje de su extorsión se fundamenta en la amenaza de compartir con el público general imágenes comprometedoras ya obtenidas. En algunos casos, las imágenes en posesión de los estafadores son reales y se obtuvieron a través de alguien que la víctima conoce o de una cuenta que fue infringida por parte de los ciberacosadores. Otras veces, los estafadores solo afirman tener material explícito, sin proporcionar ninguna prueba al respecto.
Después de convencer a las víctimas de que tienen imágenes explícitas o comprometedoras suyas, los estafadores exigen alguna forma de pago a cambio de no enviar el contenido a familiares, amigos o empleadores. En el caso de que las víctimas envíen imágenes sexualmente explícitas como pago, los estafadores a menudo usan el nuevo contenido para mantener la estafa durante el mayor tiempo posible.
Claves de la denuncia del FBI sobre el incremento de sextorsión con IA
La denuncia del FBI, por cierto, pone el acento en que en los últimos meses ha crecido el uso de IA para generar videos falsos que parecen mostrar a personas reales involucradas en actividades sexualmente explícitas. El comunicado oficial de la policía federal estadounidense dice así: “El FBI continúa recibiendo informes de víctimas, incluidos niños, adolescentes y adultos que no dieron su consentimiento, cuyas fotos o videos fueron alterados en contenido explícito”, relatan los funcionarios norteamericanos. "Las fotos o vídeos", continúa el comunicado, "luego se distribuyen públicamente en las redes sociales o sitios web pornográficos con el fin de acosar a las víctimas con prácticas de sextorsión".
Camilo Gutiérrez, máximo responsable del Laboratorio de Investigación de Eset Latinoamérica, empresa de soluciones informáticas y antivirus, señala que “se han visto muchas campañas de sextorsión este año, en las que el método más empleado consiste en enviar correos personalizados intentando intimidar a las víctimas, haciéndoles creer que fueron infectadas con código malicioso a través del cual se sustrajeron fotos o se grabaron videos íntimos mediante el empleo remoto de la cámara web. El caso es que muchas personas caen en el engaño y terminan pagando la extorsión, a menudo mediante criptomonedas o, bien, con tarjetas de regalo”.
Este método de ataque cobra ahora una nueva dimensión porque, conforme a los datos y la percepción del FBI, los cibercriminales detrás de estas campañas nutren sus amenazas en los últimos tiempos con material falso ideado con IA, que parece más real gracias al avance de las herramientas sustentadas en Inteligencia Artificial. Ese falso material, confeccionado por la técnica de IA conocida como deepfake (un acrónimo del inglés formado por las palabras fake, falsificación, y deep learning, aprendizaje profundo), consiste en la generación y recreación de rostros, voces y cuerpos realistas, que pueden ser utilizadas para suplantar la identidad de cualquier persona, y someterla a situaciones comprometedoras y humillantes.
Consecuencias más evidentes de la sextorsión
La sextorsión puede tener graves consecuencias para la reputación, la salud mental y la seguridad de las víctimas, que pueden sufrir chantaje, acoso, depresión o incluso violencia física. Además, puede ser muy difícil eliminar el contenido falso de internet, ya que éste se puede replicar fácilmente en varias plataformas. La policía federal norteamericana ha advertido, así mismo, de que estas fotos y vídeos falsos se están publicando en redes sociales y sitios web pornográficos. Esta práctica tiene como objetivo meter más presión a las víctimas y que éstas paguen un rescate para así evitar una mayor proliferación del contenido.
¿Cómo se ejecutan esas prácticas de sextorsión? El FBI ha detectado dos movimientos principales: uno de ellos hace referencia a que el agresor puede exigir dinero a cambio de no publicar las imágenes o vídeos con familiares y amigos, la otra práctica que suelen hacer estos cibercriminales es que pueden exigir que la víctima les envíe imágenes o videos reales de temática sexual.
Lamentablemente, no hay mucho margen de cosas que se puedan hacer si uno cae en la trampa de estos delincuentes. El FBI, por su parte, recomienda tener cuidado al publicar en redes sociales o enviar mensajes con fotos personales, videos e información de identificación. Además, es preferible no negociar con estos malhechores y lo mejor es acudir a los cuerpos de seguridad del estado y denunciar esta forma de chantaje.
En esa línea, el FBI insta también a las personas a tomar precauciones para evitar que sus imágenes se utilicen en falsificaciones modeladas con la inteligencia artificial: "Aunque aparentemente son inocuos cuando se publican o comparten, las imágenes y los videos pueden proporcionar a los cibercriminales un amplio contenido para explotar en actividades delictivas", señalan los funcionarios de la seguridad estadounidense. "Los avances en la tecnología de creación de contenido y las imágenes personales accesibles en línea presentan nuevas oportunidades para que los ciberdelincuentes encuentren y se dirijan a las víctimas. Esta práctica deja a esas personas vulnerables a la vergüenza, el acoso, la extorsión, la pérdida financiera o la revictimización continua a largo plazo".
Por último: las personas que han recibido amenazas de sextorsión deben conservar todas las pruebas disponibles, en particular capturas de pantalla, textos, grabaciones, correos electrónicos que documenten nombres de usuario, direcciones de correo electrónico, sitios web o nombres de plataformas utilizadas para la comunicación, así como direcciones IP.
Pautas para evitar ser víctimas de una sextorsión realizada con IA
Emplea contraseñas seguras: crea contraseñas únicas y consistentes para todas tus cuentas de Internet, ya sean de correo, redes sociales, sitios web o aplicaciones. No utilices contraseñas evidentes o sencillas de adivinar. En ese sentido, puede serte de gran utilidad el uso de un gestor de contraseñas para ayudarte a administrar y generar contraseñas seguras.
Sé consciente del riesgo potencial que comportan tus actividades en línea: ten en cuenta que cualquier cosa que compartas online puede ser utilizada en tu contra. Piensa en esa posibilidad antes de enviar imágenes o videos comprometedores y valora las posibles consecuencias.
Protege tu información personal: resulta altamente recomendable que cuides tus datos personales y eludas compartir información sensible en línea, como imágenes íntimas o videos comprometedores. Piensa dos veces antes de enviar contenido de naturaleza sexual a través de mensajes o aplicaciones, ya que una vez que esa información está en manos de otra persona, pierdes el control sobre ella.
Configura adecuadamente la privacidad en redes sociales: revisa y ajusta las configuraciones de privacidad en tus perfiles de redes sociales. Limita la visibilidad de tus publicaciones y evita aceptar solicitudes de amistad de personas desconocidas o sospechosas de querer mantener algún tipo de contacto ilícito.
Mantén actualizados tus dispositivos y aplicaciones: asegúrate de tener siempre instaladas las últimas actualizaciones de seguridad en tus dispositivos y aplicaciones. Esta prevención ayudará a protegerte contra vulnerabilidades conocidas y posibles ataques de hackers.
Ten cuidado al interactuar con desconocidos en línea: No confíes rápidamente en personas que conozcas a través de Internet, sobre todo si te piden información personal o comprometedora. Cultiva una precaución activa y mantén alta la guardia.
Extrema las precauciones con las videollamadas y webcams: asegúrate de que tu webcam esté cubierta cuando no la estés utilizando. Al participar en videollamadas, ten precaución y cerciórate de que la persona con la que te comunicas es de confianza antes de compartir cualquier tipo de contenido personal o comprometedor. No envíes imágenes o videos íntimos. Elude enviar contenido íntimo a través de mensajes o aplicaciones de mensajería, ya que podrían ser utilizados en tu contra en el futuro.
No cedas a las demandas de los chantajistas: Si alguien intenta extorsionarte o amenazarte con difundir imágenes o información comprometedora, no cedas a sus requerimientos. Es importante no darles poder ni incentivar su comportamiento.
Denuncia cualquier intento de sextorsión: Si eres víctima de sextorsión o alguien intenta chantajearte, denuncia el incidente a las autoridades policiales locales. Proporciona toda la información relevante que tengas para ayudar en la investigación.
Emplea las herramientas adecuadas para mantener tus dispositivos seguros: utiliza software antivirus y mantén tus dispositivos y aplicaciones actualizados. Este repertorio de herramientas de ciberseguridad ayuda a protegerte contra malware o spyware que puedan recopilar información personal.
Educa/forma a tus seres queridos: comparte estas recomendaciones con tus amigos y familiares para ayudarles a protegerse también. La concienciación sobre los peligros de la sextorsión y la importancia de la seguridad en línea puede prevenir futuros casos.
En resumen: recuerda que la prevención es fundamental, pero en caso de ser víctima de sextorsión, busca apoyo y asesoramiento legal. Denunciar estos delitos puede contribuir a su persecución y a evitar que otras personas se vean dañadas por estas conductas delictivas en el futuro.