Con la facilidad de acceso a diferentes dispositivos, a Internet y las redes sociales, las infancias están más expuestas al grooming, que es el acoso de un mayor a un niño, niña o adolescente, con finalidades sexuales, generalmente haciéndose pasar por otro menor.
Según la ONG Save The Children, uno de cada cinco menores ha sufrido este tipo de asedio. Estas cifras alertan sobre la importancia de que los más pequeños comprendan los riesgos y tomen medidas de seguridad cuando navegan o utilizan la red.
En este caso, la investigación policial se inició en el mes de febrero a raíz de la denuncia de un joven de Almería, y el agresor ha sido apresado en Barcelona. En su domicilio, los agentes de la Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional encontraron gran cantidad de material pedófilo en el ordenador personal, y no se descarta que haya otras víctimas.
El detenido comenzó a dialogar con el adolescente por medio de un videojuego, y luego interactuó con él a través de redes sociales hasta ganarse su confianza, consiguiendo intercambiar imágenes íntimas. También le hizo diversos regalos y le solicitó mantener relaciones sexuales, sabiendo que se trataba de un menor de edad. Finalmente, se produjo un encuentro físico entre ambos en un hotel de Almería, desplazándose el autor de los hechos más de 800 kilómetros, según indica el informe policial.
Luego de que la víctima realizara la denuncia, el adulto lo amenazó y chantajeó emocionalmente, presionándolo para que retirara la acusación. Para ello contactó a su madre y a su hermano, e incluso, lo amenazó con interponer una denuncia en sentido contrario, esgrimiendo que el joven se había aprovechado de una persona con discapacidad, simulando poseer una condición de este tipo.
El teléfono móvil del menor permitió recolectar numerosas pruebas gráficas, donde se corroboraba su testimonio. En tanto que, en el allanamiento realizado en la vivienda del agresor, la policía encontró siete discos duros, un teléfono móvil, un ordenador portátil y una tarjeta SIM, cuyo contenido está a la espera de ser analizado. Pero las indagaciones preliminares permitieron localizar nuevos indicios, tanto de los hechos ya denunciados como de un nuevo delito de posesión de pornografía infantil, al encontrar en su ordenador numeroso material pedófilo.
Los investigadores no descartan que el detenido pueda haber sido autor de otros delitos de naturaleza similar no denunciados hasta el momento, así como la aparición de nuevas víctimas.
La Policía Nacional recuerda la importancia de prevenir estas situaciones, dialogando y concienciando a los menores sobre los posibles peligros existentes en la red, y resalta la necesidad de realizar la denuncia en caso de ser víctima de un delito de este tipo.
Para ello, una de las recomendaciones principales para las familias es generar una relación de confianza con los niños para que, en caso de encontrarse en una situación problemática o comprometida, se sientan cómodos para contar lo que está pasando y no se callen por miedo o vergüenza.
Es fundamental que sean conscientes de la privacidad y de que no deben revelar información privada o personal, así como tampoco compartir imágenes ni vídeos íntimos.
Otro punto importante no confiar en desconocidos que los contacten a través de Internet, redes sociales o videojuegos. Y en caso de que se produzca una situación de acoso no ceder nunca al chantaje y pedir ayuda a un adulto de confianza.