Algo está ocurriendo con los usuarios que mandan sus teléfonos Google Pixel al servicio de reparación de la compañía de Mountain View. En las últimas semanas se han dado dos casos de personas que han visto cómo sus teléfonos han sido pirateados después de mandarlos a arreglar por la compañía tecnológica.
Una de las afectadas ha sido la diseñadora de juegos y escritora estaounidense McGonigal, que ha contado a través de Twitter lo que le sucedió detalladamente.
Tras mandar su teléfono al servicio técnico de la empresa de la gran G pudo comprobar cómo alguien lo usó para iniciar sesión en su Gmail, Drive, cuenta de respaldo de fotos de su email y Dropbox.
Según relata, pudo ver en los registros de fotos "que abrieron un montón de selfies con la esperanza de encontrar desnudos". Las imágenes que miraron "eran de mí en traje de baño, con sujetadores deportivos, vestidos ajustados y de los puntos después de la cirugía”, escribe McGonigal.
Parece ser que la escritora nunca llegó a recibir su móvil de vuelta y en las siguientes semanas le cobraron por un dispositivo de reemplazo.
El teléfono sí habría llegado al centro de Google
La diseñadora de juegos subraya que la información de seguimiento de FedEx dejaba claro que su móvil había llegado a las instalaciones de Google hacía semanas. Y lo curioso es que horas después de que finalmente recibiera un reembolso por el dispositivo, alguien parecía haber usado el teléfono extraviado para borrar las verificaciones de autenticación de dos factores e iniciar sesión en varias de sus cuentas, incluyendo Dropbox, Gmail y Google Drive.
Esta actividad implicó la recepción de varias alertas de seguridad por email a sus cuentas de respaldo. No obstante, también sostiene que habían borrado dichas notificaciones de seguridad de esas cuentas.
La web The Verge pidió explicaciones a Google y obtuvo la respuesta de Alexa Moriconi, un portavoz de la casa. "Después de una investigación exhaustiva, podemos decir con seguridad que el problema que afecta al usuario no estaba relacionado con el dispositivo RMA (Autorización de devolución de mercancía). Hemos trabajado en estrecha colaboración con la usuaria para comprender mejor qué ocurrió y cuál es la mejor manera de proteger la cuenta en el futuro".
Por ahora no ha trascendido si el dispositivo fue interceptado dentro del centro de reparación de Google o mientras se encontraba en tránsito. Y tampoco se sabe quién lo sustrajo.
En sus instrucciones de reparación oficiales Google recomienda hacer siempre una copia de seguridad y después borrar el contenido anes de enviarlo.
En cualquier caso, este sería el segundo informe de problemas sufridos con un smartphone propio de la casa que se ha enviado a reparar y que ha supuesto la filtración de datos privados y fotos.