El robo de identidad preocupa más que nunca. Y no estamos hablando de la suplantación para cometer delitos mediante el robo o falsificación del DNI.Un estudio de Avast revela datos muy interesantes relacionados con la actitud de la ciudadanía en general con respecto a la ciberseguridad, sus miedos e inseguridades. Y muchas de ellas tienen repercusiones sobre importantes sectores, como la banca. Esta investigación forma parte de un amplio estudio global desarrollado con la compañía internacional de investigación de mercados YouGov y Forsa, sobre las tendencias globales de la ciudadanía digital y estos son los resultados obtenidos en España..
En cuanto a las preocupaciones online, el robo de identidad, como ya hemos dicho,es el principal quebradero de cabeza para todos los grupos de edad (45%) analizados. Le siguen de cerca el robo de contraseñas (30%) y la infección por virus (23%).
Las mujeres más reacias a exponer su privacidad y más temerosas en cuanto a la seguridad
Estas preocupaciones disuaden a mucha gente a la hora de hacer trámites online, como la gestión a través de banca online o la participación en redes sociales. El 73% de las personas afirma haber decidido no hacer algo en Internet por motivos de seguridad y privacidad; este nivel es mayor entre las mujeres (76% frente al 70% de los hombres).
- El 42% decidió no descargar determinados archivos o contenidos
- El 39% no utiliza el Wi-Fi público
- El 36% no configura cuentas online con datos personales
- El 33% ha evitado comprar algo en Internet
- El 23% no comparte cosas en las redes sociales
Tanto los más jóvenes como los mayores admiten no tener suficientes conocimientos sobre cómo protegerse en Internet
En total, un 26% de las personas encuestadas considera que no tiene suficientes conocimientos sobre cómo protegerse en Internet. Este porcentaje es muy alto, tanto entre las generaciones más jóvenes como las de mayor edad: el 29% de los jóvenes de 18 a 24 años, el 31% de los de 55 a 64 años y el 35% de los mayores de 65 años.
Con relación a los métodos que adoptan para protegerse en Internet, el 79% dispone de software antivirus, el 59% utiliza un cortafuegos y el 38% una VPN. De los que no tienen software antivirus, el 9% admite no saber qué es y el 23% no sabe cómo instalarlo, cifra que aumenta con la edad hasta el 26% entre las personas de 55 a 64 años y el 45% entre los mayores de 65.
Un 38% de los jóvenes de entre 18 y 24 años pasan más de tres horas al día en internet, la confianza en la red va disminuyendo con la edad, pero un 30%de mayores de 65 años emplea ese mismo tiempo
Los resultados apuntan a una correlación directa entre el tiempo que se pasa en Internet y la confianza en la red. A nivel general, el 69% de las personas se sienten seguras en Internet, pero esta confianza disminuye con cada grupo de edad y se reduce al 59% en los mayores de 65 años
Al margen de las tareas relacionadas con el trabajo, el estudio da a conocer que los españoles entre 18 y 24 años son los que más tiempo pasan en Internet, con un 38% de ellos dedicando más de tres horas al día, en comparación con el sólo el 19% de las personas de 55 a 64 años y el 24% de las mayores de 65. A nivel global los porcentajes son más altos: un 51% de los usuarios de entre 18 y 24 años pasa más de tres horas al día en Internet, mientras que entre los de 55 a 64 el porcentaje baja al 31% y en los mayores de 65 se queda en el 30%.
Las tareas más sencillas son las más difíciles para los usuarios, como por ejemplo, el ajuste de la configuración de privacidad
El estudio ha revelado que las tareas relativamente sencillas son las que más cuestan a los usuarios. Los tres problemas más importantes identificados son: el ajuste de la configuración de privacidad, la realización de copias de seguridad de los archivos y la resolución de problemas y ventanas emergentes en el ordenador.
"Es positivo ver que se registran niveles tan altos de confianza en Internet”, señala Jaya Baloo, directora de Seguridad de la Información de Avast. Sin embargo, no podemos ignorar las diferencias que vemos en esta confianza en función de la demografía y debemos tener en cuenta a las generaciones mayores al hablar de educación digital. Nosotros, como industria, tenemos que ser facilitadores para los ciudadanos digitales más vulnerables, y compartir el conocimiento online tiene que formar parte de las conversaciones familiares. Las generaciones más jóvenes, en concreto, han desempeñado un papel esencial a la hora de ayudar a sus padres y abuelos a navegar por el mundo online, lo que vemos confirmado por nuestra encuesta".
Los abuelos y padres que piden ayuda a sus hijos se sienten una carga, y la percepción es completamente errónea: para los más jóvenes es un orgullo ayudarles
La mayoría de los encuestados que no se sienten seguros en Internet afirman que esto les molesta (45%), y seis de cada diez (64%) admiten sentirse como una carga si tienen que pedir ayuda a otros. Sin embargo, estas preocupaciones resultan en su mayor parte erróneas ya que los sentimientos más comunes expresados por los que ayudaron a otros en Internet. Se sintieron útiles (57%), valorados (27%) y orgullosos (26%).
Cuatro de cada diez usuarios pertenecientes a las generaciones mayores (el 42% de los mayores de 55 años y el 38% de los mayores de 65 años) admite que le gustaría recibir ayuda online de los miembros más jóvenes de la familia, y, efectivamente, el estudio revela que es la generación más joven la que más ofrece este tipo de ayuda. El 54% de las personas que han ayudado a otros con Internet, ayudaron a sus padres, frente a sólo un 16% que ha tenido que ayudar a sus hijos.
Esta ayuda intergeneracional se correlaciona con la preocupación de las personas por sus familiares mayores, ya que el 27% expresa su preocupación por sus padres en Internet, y el 45% la expresan por sus abuelos.
A los hijos (un 40% de los encuestados) les preocupa que sus mayores puedan ser víctimas de un sitio web falso, y a otro 40 % que pueda serlo de datos personales
Está claro que, aunque la gente está preocupada por su propia seguridad en Internet (el 30% está ligeramente preocupada y el 57% muy preocupada), también lo está cuando piensa en sus padres o abuelos. El 83% registró niveles de preocupación por la seguridad de sus padres, que aumentó al 85% desde el inicio de la pandemia, y el 86% se preocupó por sus abuelos, cifra que incrementó al 91% desde la pandemia.