Los jugadores de Diablo, no han podido disfrutar de su título preferido hace unos días. Un ataque de denegación de servicio distribuido (DDoS) apuntó contra los servidores de Activision Blizzard, que son usados para autenticar a los usuarios y conectarlos a los juegos.
Fruto de ello, se hizo casi imposible disfrutar de algunos exitosos títulos de la casa, como Diablo IV, World of Warcraft o Call of Duty.
Un ciberataque DDos no es de los más graves, pero sí puede hacer que aplicaciones, servicios digitales, páginas webs, etc estén inaccesibles durante horas o días al saturar sus servidores por un alto tráfico y 'tirarlos'.
En este caso, según explica Activision en un comunicado, el ataque se prolongó durante más de 10 horas y fue mitigado a última hora del pasado domingo. Algunos usuarios aseguraron no poder conectarse ni siquiera varios días después.
Por ahora la compañía de videojuegos no ha identificado el grupo de piratas informáticos detrás del ataque. Hasta el momento tampoco ha habido cibermalos que reivindiquen su autoría.
No es la primera vez
Últimamente Activision ha sido un objetivo recurrente para los cibermalos, según recuerda The Record Media.
A principios de este año, la empresa confirmó que los piratas informáticos obtuvieron acceso a sus sistemas internos a través de un mensaje SMS de phishing enviado a un empleado.
En septiembre pasado, los servidores de la compañía sufrieron otro ataque DDoS, lo que impidió que numerosos usuarios pudieran jugar en sus equipos. Un mes después, en octubre del año pasado, el esperado videojuego Overwatch 2 de Activision Blizzard no estuvo disponible durante el lanzamiento debido a problemas de conectividad a gran escala.