Los servicios de seguridad polacos han anunciado que han frustrado una campaña cibernética perpetrada por Rusia y Bielorrusia que buscaba desestabilizar el país.
El ministro de Asuntos Digitales, Krzysztof Gawkowski, ha revelado que la operación tenía como fin robar datos para hacer chantajes.
“Los servicios exteriores bielorrusos y rusos… tenían un objetivo específico: extorsionar información, chantajear a individuos e instituciones y librar una ciberguerra de facto”, ha subrayado el responsable.
Estos ciberataques se han llevado a cabo en represalia por el apoyo de Polonia a Ucrania tras la invasión del país por parte de Rusia.
El ministro también ha compartido que los ciberataques contra organizaciones e instituciones polacas se habían duplicado desde el año pasado.
“Polonia ha registrado hasta un millar de ataques online diariamente dirigidos a instituciones y agencias gubernamentales, dijeron funcionarios, vinculándolos con el apoyo del país a su vecina Ucrania en su guerra de dos años y medio contra la invasión rusa”, informó Associated Press.
Durante el primer semestre se contabilizaron más de 400.000 ciberataques que se quedaron en tentativa o bien fueron exitosos, superando el total de 370.000 incidentes de todo el año anterior.
Para no perder el tren
En agosto del año pasado la Agencia de Seguridad Interior de Polonia (ABW) y la policía nacional iniciaron una investigación sobre un ciberataque a la red ferroviaria estatal. Las autoridades del país están investigando ahora mismo el uso no autorizado del sistema usado para controlar el tráfico ferroviario.
"Por el momento no descartamos nada", ha declarado a la Agencia de Prensa Polaca el coordinador adjunto de los servicios especiales, Stanislaw Zaryn. “Sabemos que desde hace meses se están produciendo intentos de desestabilizar el Estado polaco. Estos intentos los ha llevado a cabo la Federación Rusa en colaboración con Bielorrusia”, ha añadido.
El sistema ferroviario de Polonia representa desde la invasión rusa una infraestructura de tránsito crucial para el apoyo de los países occidentales a Ucrania.