Así se está librando la ciberguerra entre Israel y Hamás

Más de 50 grupos hacktivistas se sumaron al conflicto en sus primeros días y están utilizando distintas técnicas, principalmente ataques DoS.

Silvia

Redactora especializada en Seguridad y Tecnología.

Guardar

Banderas de Palestina e Israel sobre un fondo en llamas, en representación de la guerra que mantienen.
Banderas de Palestina e Israel sobre un fondo en llamas, en representación de la guerra que mantienen.

Al igual que con la guerra de Ucrania y Rusia, el conflicto entre Israel y Hamás se trasladó rápidamente al ámbito ciber con hacktivistas y actores de amenazas posicionándose en uno de los dos bandos. En Escudo Digital ya informamos sobre ello el pasado 13 de octubre, seis después de que el sangriento ataque terrorista de Hamás contra Israel provocando una contundente respuesta por parte de Tel Aviv, que no tardó en declarar el estado de Guerra. Así se desencadenó la contienda y el cruce de ciberataques entre los 'ciberdefensores' de Palestina e Israel.  

Ahora queremos ofrecer más detalles sobre esta nueva ciberguerra tomando como referencia un análisis del investigador de ciberseguridad Jeremiah Fowler, cofundador de Security Discovery.

Más de 50 grupos se han sumado a la ciberguerra, principalmente en apoyo a Palestina

Según señala Fowler basándose en datos de CyberKnow, un rastreador de guerra cibernética, se estima que en los primeros días del conflicto participaron un total de 58 organizaciones de ciberdelincuentes lanzando diversos ciberataques contra el bando enemigo. Aquí la balanza se inclina claramente hacia Palestina, con 48 grupos operando a su favor frente a 10 que lo hacen en apoyo a Israel. Entre los primeros y como ya resaltamos, se encuentran la facción de Anonymous Sudan, el grupo pro-ruso Killnet y las bandas Cyber Av3ngers, Ghosts of Palentine y Storm-1133, mientras que entre los segundos destaca el colectivo Garuna.

El análisis de Fowler coincide con nuestra noticia al señalar que sus víctimas han sido, por un lado, sitios del gobierno israelí y organizaciones del país pertenecientes a los sectores de defensa, energía y telecomunicaciones, así como el Jerusalen Post, el diario en inglés más importante de Israel. "Al atacar estos sitios, los atacantes pueden manipular la información y limitar el acceso de los civiles a noticias en tiempo real, instrucciones gubernamentales y otra información importante". Y, por otro lado, a los ataques cometidos contra las webs de Hamás y la Universidad Islámica de Gaza suma los que han sufrido proveedores de servicios de internet de Gaza, de los que se sospecha que está detrás el grupo proisraelí ThreatSec. En este sentido, subraya que el bloqueo del acceso a internet deriva en que se dificulte tanto la capacidad de las personas para adquirir informaciones como las capacidades cibernéticas de aquellos que no pueden conectarse a internet.

Los métodos de ciberataque que más se están utilizando

El análisis también concuerda con lo que ya dijimos, que las principales ofensivas que se están perpetrando hasta el momento están siendo los ataques de denegación de servicio (DoS), que consisten en tumbar servicios y aplicaciones saturando sus servidores a través de una oleada de tráfico.

Pero obviamente no solo se están produciendo ataques DoS. El investigador recalca que otras tácticas que se están empleando con asiduidad están siendo:

  • Propaganda y desinformación: el método de ciberguerra más sencillo de llevar a cabo por las personas de a pie, ya que no requiere conocimientos técnicos y solo es necesario tener conexión a internet.
  • Ciberespionaje: Los hacktivistas de ambas partes están tratando constantemente de monitorear las comunicaciones, infiltrarse en redes y obtener información que puedan utilizar en su propio beneficio.
  • Hackeos: Páginas web, cuentas de redes sociales y plataformas digitales asociadas a entidades israelíes y palestinas han sido objeto de hackeos, alrededor de 100 contra ambos bandos en la primera semana de la guerra.

Consecuencias y lecciones de esta nueva ciberguerra

"Por ahora, el impacto de estos ataques cibernéticos parece ser mínimo y solo están causando interrupciones menores", afirma Fowler. No obstante, apunta que, a medida que más grupos y actores se unan a la lucha, las ciberamenazas no van a dejar de aumentar y podrían tener repercusiones de amplio alcance. Esta es la lectura que hace al final de su análisis, en la que invita a aprender de lo que está ocurriendo, advirtiendo que la ciberguerra define una nueva realidad de los conflictos en la era digital y es fundamental abordar los desafíos que implica en materia de ciberseguridad.

"Los ciberataques contra cualquier nación plantean peligros importantes con consecuencias de gran alcance. La alteración de infraestructuras críticas, incluidas las redes eléctricas y los sistemas de comunicaciones, también puede afectar directamente a las poblaciones civiles. Estos ataques sirven como una advertencia para los países de todo el mundo: todas las naciones deben estar altamente preparadas para posibles ataques futuros e implementar medidas proactivas de ciberseguridad. Desafortunadamente, cuando se trata de un ciberataque, ya no se trata de si sucede, sino de cuándo sucederá. En el futuro, las mismas amenazas potenciales se aplicarán a las corporaciones, las empresas privadas y los individuos. Las herramientas y métodos utilizados hoy por los hacktivistas, podrían utilizarse mañana contra usted, su empresa o su gobierno. Comprender cómo se producen los ataques es el primer paso para protegerse en línea y su vida digital".