Las autoridades de Bulgaria han informado este fin de semana de haber sido víctimas de un ciberataque que habría interrumpido temporalmente el acceso a varias páginas oficiales.
El fiscal jefe búlgaro, Ivan Geshev, ha informado de que las páginas web de la presidencia, el ministerio del Interior, los de Defensa y Justicia y el Tribunal Constitucional han sido objetivos de los ciberdelincuentes. Además, ha atribuido su autoría a hackers rusos.
"El objeto del ataque no es la presidencia, sino el estado búlgaro. Este es un problema grave. Está claro para todos nosotros que somos parte de la familia europea y protegemos los valores europeos. Una vez que estamos claramente posicionado en este sentido, es normal tener consecuencias", ha asegurado.
Geshev también ha aclarado que el ataque a la página de la presidencia búlgara y al resto de organismos ha sido del tipo denegación de servicio distribuida (DDoS). Hay que recordar que estas amenazas aprovechan los límites de capacidad específicos de los recursos de red para saturarlos mediante un número excesivo de solicitudes o visitas y así tumbarlos.
En este tipo de ataques no se suelen exfiltrar datos, por lo que se trata de algo más llamativo y que permite 'ponerse una medalla' para los cibermalos, pero que no tiene un impacto respecto a vulneración de datos sensibles.
Desde la detección del problema las autoridades tomaron las medidas necesarias para reducir su impacto y no se detectó un acceso al contenido del sitio.
KillNet ataca de nuevo
El grupo de piratas informáticos KillNet ha reclamado la responsabilidad del incidente. Así lo compartieron en su canal oficial de Telegram.
KillNet se ha mostrado como un colectivo que se describe a sí mismo como patriotas pro Kremlin. En los últimos meses han dirigido sus ataques contra organismos oficiales e infraestructuras europeas, tras declarar 'la guerra' a una decena de países.
Seguramente el incidente más sonado fuera su ataque contra el festival de Eurovisión (que este año excluyó a Rusia). Además, últimamente también se les ha visto tirando varias webs oficiales de estados americanos, dañando una web del Gobierno de Japón o incordiando a una empresa energética lituana.
Precisamente KillNet no suele asociarse a ataques graves de ransomware u otras amenazas avanzadas, sino que más bien tratan de sacar pecho con ataques DDoS y hacer propaganda.