En el contexto de las maniobras conjuntas entre Marruecos y Estados Unidos que se están ejecutando en estos días en suelo marroquí, se está desarrollando el ejercicio de guerra electrónica Arcane Thunder (de las que ya hablamos en Escudo Digital) y que tiene como principal objetivo mejorar las capacidades de detección y neutralización de amenazas electrónicas por parte de las Fuerzas Armadas de Marruecos, en estrecha colaboración con los militares de Estados Unidos. Este ejercicio se centra sobre todo en la implementación y adiestramiento de tecnologías avanzadas como globos de gran altitud y drones especializados, permitiendo a los participantes desarrollar habilidades críticas en la localización y neutralización de transmisores enemigos en un entorno simulado.
Rabat además está consiguiendo con este ejercicio (que es solo el último de varios ya realizados) fortalecer la interoperabilidad entre las fuerzas marroquíes y estadounidenses, asegurando que ambos ejércitos puedan trabajar de manera conjunta en supuesto escenario de conflicto que fuera real.
Obviamente en estos ejercicios Estados Unidos desempeña el papel crucial al proporcionar entrenamiento avanzado, asistencia técnica y la mayoría del material a Marruecos para que sus soldados se adiestren en este tipo de tecnologías, fundamentales en la guerra del futuro… y del presente. Los americanos han facilitado el acceso a tecnologías de última generación, como los drones Kraus Hamadi Aerospace K-1000 y Shield AI V-BAT, que son utilizados en misiones de reconocimiento y vigilancia. Además de esto, el personal militar estadounidense ha estado capacitando a las tropas marroquíes en el uso de técnicas de guerra electrónica y ciberseguridad, incluyendo la manipulación de equipos portátiles de interferencia y la aplicación de tácticas modernas para proteger las comunicaciones y neutralizar amenazas electrónicas. No cabe duda que cualquier colaboración militar con los soldados de Washington siempre resulta interesante, y en esta ocasión está muy claro que Marruecos ha podido mejorar y modernizar sus fuerzas armadas en este campo electrónico y aumentando así sus capacidades generales.
Como ya mencionamos en un anterior artículo, la cooperación militar entre Marruecos y Estados Unidos en ejercicios como el Arcane Thunder tiene implicaciones significativas para la seguridad y la geopolítica en la región del Mediterráneo.
Sin duda, para Rabat este tipo de colaboraciones refuerza su posición estratégica en el norte de África, permitiéndole proyectar poder y proteger sus intereses en un entorno cada vez más complicado. Si lo miramos desde el punto de vista de España, el fortalecimiento de las capacidades militares marroquíes, especialmente en áreas como la guerra electrónica, siempre será un inconveniente para nuestra estrategia de disuasión y podría alterar el equilibrio de poder en la región.