El coronel Vicente Infante, jefe del programa del Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8x8 Dragón del Ejército de Tierra en Defensa, ha pedido la baja en destino, según informa Infodefensa.com. Fuentes consultadas por Escudo Digital indican que a la solicitud de baja del responsable del proyecto en la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), pueden sucederse otras peticiones.
En el origen del conflicto se sitúan los continuos retrasos que sufre el Dragón, programa liderado por la empresa Tess Defence, que está formada por Indra, GDELS-Santa Bárbara Sistemas, Sapa Placencia y Escribano Mechanical & Engineering. El primer 8x8 Dragón debió ser entregado en 2022 y todavía no se ha proporcionado ninguna unidad al Ejército de Tierra, con un compromiso inicial de 350 unidades y un coste entre 7 y 8 millones de euros por unidad, según la versión del vehículo.
Ha sido un año especialmente problemático. El fallo de la Audiencia Nacional que confirmaba una multa de 9 millones de euros impuesta a la Unión Temporal de Empresas (UTE) por los retrasos en el programa del vehículo 8x8 Dragón supuso un golpe significativo.
Indra toma la mayoría
El retraso acumulado de tres años en la entrega de los prototipos y las derivas económicas no solo lastran los balances financieros. Sobre todo, afecta a su reputación dentro de la industria.
Los continuos aplazamientos han obligado recientemente al Gobierno a tomar medidas y a solicitar a Indra que se hiciera cargo del proyecto más importante del Ejército de Tierra. El pasado 30 de septiembre, el Consejo de la tecnológica aprobó la adquisición de una posición mayoritaria de dicho consorcio que pasa a ser del del 51,001%.