Escribano Mechanical and Engineering ha sido seleccionada para desarrollar y fabricar un innovador Sistema de Lanzacohetes de Alta Movilidad en su nuevo centro en Córdoba, en colaboración con Rheinmetall Expal Munitions, bajo un contrato valorado en 697 millones de euros.
Este desarrollo posiciona a Escribano como pionera en el sector de seguridad y defensa en la región, aprovechando el impulso del proyecto de la Base Logística del Ejército de Tierra. Además, la firma ha mostrado un crecimiento significativo, con una tasa anual del 35% en los últimos diez años, fortaleciendo su presencia global en más de 25 países, incluyendo una relación estratégica con los Emiratos Árabes Unidos.
SILAM (Sistema de Lanzacohetes de Alta Movilidad)
El Ministerio de Defensa de España adquirió el sistema lanzacohetes SILAM por 575 millones de euros el pasado 2023, que incluye 12 lanzadores y 680 cohetes guiados. Desarrollado por Escribano M&E y Rheinmetall Expal Munitions, SILAM permitirá ejecutar ataques de artillería a larga distancia. El proyecto, que se basa en el sistema PULS de Elbit Systems, distribuirá su producción en varias localidades españolas, destacando la integración de diferentes tipos de munición y vehículos, y promete mejorar las capacidades de defensa nacional.
Base Logística del Ejercito de Tierra en Córdoba ‘General de ejército Javier Varela’.
La ciudad de Córdoba ha sido finalmente el lugar escogido para albergar la sede de la base logística del Ejército de Tierra, cuya construcción supondrá un extraordinario impulso económico y social para la zona. Así, está previsto que el proyecto contribuya a la creación de unos 1.600 puestos de trabajo de alta cualificación, en un gran porcentaje personal civil. Hasta allí se desplazó en el día de ayer la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien ha sido testigo de la evolución de las obras de la base ‘General de ejército Javier Varela’.
Se trata de un proyecto en el que el Ejército de Tierra viene trabajando desde hace más de 10 años, con el fin de racionalizar sus estructuras de apoyo logístico, para así mejorar la eficacia y reducir costes en el mantenimiento de las infraestructuras. Un centro logístico con los más altos estándares tecnológicos, que agrupará las actividades de mantenimiento del material del Ejército en una sola instalación.
Desde que se iniciaron los trabajos para la transformación del Ejército hacia la futura “Fuerza 2035”, este proyecto ha cobrado una mayor trascendencia. De este modo, se pretende que la nueva base se convierta en un centro moderno que incorpore sistemas basados en la robótica, inteligencia artificial, impresión en 3D, realidad virtual y aumentada, etc. Para ello, contará con la colaboración de la Universidad de Córdoba. Una alta tecnología que va a permitir una optimización del personal militar, aumentando el disponible para la Fuerza. Se trata, pues, de un proyecto de Estado, único y pionero en el mundo.
El principal reto es la sincronización, ya que se debe realizar la transición del actual modelo al nuevo sin pérdida del apoyo logístico. La necesidad de mantener la cadena logística operativa y los esfuerzos en atender de manera preferente las diversas circunstancias del personal militar y civil implicados condicionan la hoja de ruta para la transición. En este sentido, la actividad en los centros actuales se mantendrá hasta la completa puesta en marcha de la nueva base, de forma que el apoyo logístico esté siempre garantizado.
En definitiva, se trata de un proyecto que redundará en una optimización integral de la logística militar al más alto nivel y que será un motor tecnológico, de creación de empleo y de I+D+i para la región.
Por lo que se pudo ver en la visita oficial de la ministra en el día de ayer, las obras de esta base avanzan a buen ritmo y conforme a los plazos establecidos, lo que permitirá que, tras los trabajos de vallado, urbanización y canalización de suministros, arranquen las edificaciones en apenas 12 meses.