El consorcio alemán Rheinmetall ha completado la adquisición del grupo español fabricante de municiones Expal Systems S.A.U. en una operación que fue anunciada a mediados del pasado mes de noviembre, cuando parecía ultimada, pero tenía que ser aprobada por la UE y por los respectivos consejos de ministros. Las autoridades competentes han dado luz verde a la operación y este mismo martes ha tenido lugar la transferencia de las actividades de Expal S.A.U. a Rheinmetall, según ha informado el grupo germano en un comunicado en el que precisa que el precio de la compra es de unos 1.200 millones de euros.
Con la adquisición de Expal, Rheimetall pretende asegurar y reforzar su negocio principal de armas y propulsores. Así lo señala el propio consorcio, que confía en que le va a permitir seguir ampliando su posición como un "importante" proveedor de las Fuerzas Armadas de la OTAN, aumentando "significativamente" su capacidad de producción de munición, especialmente de artillería, mortero y calibre medio.
Esta operación supone un nuevo paso hacia la unificación del sector de defensa en Europa, como resaltamos allá por noviembre advirtiendo que también es un paso definitivo para la enajenación del sector de defensa español en lo referente a la munición de grueso calibre para obuses, con las implicaciones que ello conlleva: para necesidades propias, nos encontramos en la situación de que se ha perdido la autonomía en lo relativo a capacidad de fabricación y suministro.
Como explicamos entonces, Expal es una de las dos empresas fabricantes en España de munición para obuses de calibres NATO 105 mm y 155 mm e incluso del calibre ruso 122mm. La otra es la antigua Santa Bárbara, que fue vendida por el INI al grupo armamentístico norteamericano General Dynamics y pasó a llamarse General Dynamics-Santa Bárbara Sistemas. Expal se adjudicó dos de las cuatro fábricas de Santa Bárbara, las de Trubia y Murcia, que ahora van a estar en manos de Rheinmetall al igual que el resto de las fábricas de la compañía, situadas en Burgos, Albacete, El Gordo, Navalmoral y Texas (Estados Unidos).
Según ha adelantado el grupo alemán, la empresa española seguirá operando como Rheinmetall Expal Munitions, manteniendo todas sus fábricas operativas, con previsión de nuevas ampliaciones, así como a todo su personal. Además, asegura que seguirá teniendo a las fuerzas armadas españolas como "socio preferente y clave, ofreciendo sus productos, tecnología y capacidades industriales".
"Rheinmetall está muy complacida de dar la bienvenida a una nueva empresa al Grupo, y especialmente de aumentar su plantilla con empleados altamente cualificados. Reforzado por Rheinmetall Expal Munitions, el Grupo seguirá contribuyendo a la seguridad mundial, satisfaciendo las necesidades de un mercado en rápido crecimiento", afirma el fabricante de armas germano, que ya estaba presente en nuestro país contando con una planta en Abadiano (Vizcaya).
El entorno del mercado y la posición de Rheinmetall, con el foco en Ucrania
En su comunicado, Rheinmetall remarca que esta operación se produce en un momento en el que el mercado está experimentando un rápido crecimiento, "impulsado por el aumento de la demanda de equipos militares en países de todo el mundo". Gracias a ella, afirma que va a reforzar "significativamente" su cartera de productos y se va a situar en una "posición favorable para responder a las nuevas y complejas necesidades de adquisición de munición".
El grupo alemán también pone en valor su posición como un "importante proveedor" de las fuerzas armadas ucranianas, a las que, según indica, ha surtido de "grandes cantidades de munición de mediano y gran calibre, munición de cañón automático de 20 mm para el vehículo de combate de infantería Marder, y munición de 105 mm y 120 mm para los carros de combate Leopard 1 y Leopard 2". Además, apunta que está ultimando el envío de un primer lote de munición de 35mm para el tanque antiaéreo Gepard. En esta línea cabe recordar que hace solo unos días Rheinmetall anunció la apertura de una planta de vehículos blindados en Ucrania en los próximos cuatro meses.