Ya en marzo 2023 la empresa fabricante de armas alemana Rheinmetall anunció su decisión de construir una fábrica en Ucrania, que podría producir hasta 400 de los tanques de batalla principales Panther KF51 previstos por la compañía al año.
Muchos expertos militares lo definían como "planes dudosos" por vulnerabilidades que van desde la seguridad del sitio hasta los riesgos de la cadena de suministro.
Posteriormente el CEO de Rheinmetall, Armin Papperger, abordó el asunto con los medios alemanes y ha confirmado que la compañía estaba negociando con Ucrania sobre la posibilidad de invertir 200 millones de euros (215 millones de dólares) en una nueva planta de tanques que podría equipar a las fuerzas de Kiev con blindaje pesado.
De todo esto hace cinco meses, y hace 10 días, estudiados pros y contras, el mayor fabricante de armas de Alemania ha anunciado la apertura de una planta de vehículos blindados en Ucrania en las próximas 12 semanas.
Rheinmetall también capacitará a ucranianos para mantener los tanques y otros vehículos blindados montados en la fábrica, que estará ubicada en la parte occidental del país, la más cercana a Polonia, para garantizar su defensa y cadena logística.
“Los ucranianos tienen que ayudarse a sí mismos, si siempre tienen que esperar a que los europeos o estadounidenses les ayuden durante los próximos 10 o 20 años… eso no es posible”, ha manifestado Papperger, quien ha añadido que los trabajadores de la fábrica construirían y repararían el vehículo blindado de transporte de personal Fuchs de Rheinmetall, llamado así por la palabra alemana para zorro, bajo licencia en las instalaciones.
Rheinmetall (RNMBF) operará la planta en asociación con Ukroboronprom, un grupo de defensa estatal ucraniano, que también será propietario de la instalación. En mayo, las empresas anunciaron un acuerdo para impulsar las "capacidades de tecnología de defensa" de Ucrania.
Ante estas noticias, Rusia ha amenazado con bombardear la planta alemana de Rheinmetall si se construye en Ucrania. Maria Zakharova, portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, ha señalado que "esta planta, si se construye, se convertirá en un objetivo legal para las Fuerzas Armadas de Rusia".
En contestación, Rheinmetall ha anunciado que desplegará sus propias defensas antiaéreas en Ucrania para proteger la planta. Probablemente se trate de los sistemas antiaéreos MANTIS y de los sistemas antiaéreos autopropulsados Skynex (este último entró en producción hace sólo dos años).
Skynex está equipado con un cañón Oerlikon Mk3 de 35 mm, que puede disparar a una distancia de 4 kilómetros. Su cadencia de tiro es de 1.000 disparos por minuto. El sistema está diseñado para contrarrestar misiles de crucero, drones y aviones.
MANTIS (Modular, Automatic and Network capable Targeting and Interception System) es un desarrollo más antiguo. Su producción comenzó hace unos 12 años. Se trata de un sistema antiaéreo fijo de corto alcance para la defensa contra fuego de artillería y misiles. Tras décadas de bastante laxitud en la autodefensa europea y su industria, el consorcio Rheinmetall se muestra muy activo.
Alemania planea gastar el 2% del producto interno bruto en defensa a partir de 2024, en línea con el objetivo que la OTAN ha establecido para todos los estados miembros. Pero Papperger dijo que eso no ha ido lo suficientemente lejos para proteger a la alianza de un posible ataque ruso.
"Como mínimo -dijo- la OTAN debería elevar su objetivo al 3% del PIB, y agregó que Europa no estaría lista para defenderse adecuadamente en un conflicto armado con Rusia”. La región tiene “que invertir más y necesitamos algunos años para llenar las existencias [de municiones] porque, en este momento, las existencias están vacías”.
La semana pasada, los legisladores alemanes acordaron provisionalmente comprar 6.000 millones de euros (6.500 millones de dólares) en municiones de Rheinmetall, y parte de eso se reservó para Ucrania, dijo Papperger.
Gran parte de esas municiones saldrán de las fábricas de Trubia, Burgos, Navalmoral, El Gordo, Albacete y Murcia, pues, recordemos, que Rheinmetall compró la española Expal Systems a Maxam, valorándola en 1.200 millones, en noviembre de 22.
Una última nota, para los que no lo sepan: a la marca Rheinmetall, fundada en 1889, se le deben armas míticas como el famoso cañón del 88/flak 41 2GM, el cañón 120 mm de los Leopard y Abrahams, y un largo etcétera.
Rheinmetall es un fabricante alemán, pero sus propietarios son Fidelity Investments /USA y el famoso fondo BlackRock (Apple, Unilever, McDonald's, Adidas, Vivendi; los bancos Société Générale, Barclays, JP Morgan, BBVA y Santander, Bank of America, Citi, Credit Suisse, Deutsche Bank, Visa; los laboratorios Eli Lilly y Sanofi, General Electric, SAP, Telefónica ,Microsoft, Amazon, Coca Cola, Twitter, PepsiCo, Ferrari,Pfizer o Uber). Y digo yo, ¿no les saldría mejor comprar Rusia y despedir a Putin?