La Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO/ECOWAS por sus siglas en francés e inglés) es un grupo regional de quince países de África Occidental: Benín, Burkina Faso, Cabo Verde, Costa de Marfil, Gambia, Ghana, Guinea-Bisáu, Guinea, Liberia Malí, Níger, Nigeria, Senegal, Sierra Leona y Togo.
Y dicha organizó anunció ayer domingo 30 de julio que suspenderá las transacciones comerciales y financieras entre ella y Níger. También que suspende su ayuda financiera a este país, que acaba de vivir un cambio de poder, y congela los bienes de sus autores y sus simpatizantes.
Este mismo domingo en Abuja, capital de Nigería, tras su cumbre extraordinaria convocada por el golpe de Estado, la CEDEAO emitió un comunicado en el que declaraba “un bloqueo económico y logístico a Níger”. Los golpistas tienen “una semana para devolver al poder al depuesto presidente , y a partir de entonces se podrán tomar ‘todas las medidas’, incluidas las militares,” contra ellos.
La CEDEAO exige la "liberación inmediata" del presidente Bazoum y el "retorno completo al orden constitucional" en el país, según las resoluciones leídas al final de la cumbre.
En el plano económico se han congelado los activos de Níger en el Banco Central de los Estados de África Occidental y en los bancos comerciales, las fronteras con Niger están cerradas y los vuelos comerciales están suspendidos.
En 2022, la CEDEAO decidió crear una fuerza regional destinada a intervenir contra los yihadistas, pero también en caso de golpe de Estado.
En diciembre del pasado año, los líderes de algunos de los Estados miembros de la organización se reunieron en Nigeria en su 62ª sesión ordinaria y lo acordaron así. Alieu Touray, presidente de la comisión de la CEDEAO, anunció que desde la organización están “determinados a crear una fuerza regional que intervendrá en cualquier momento de necesidad, ya se trate del área de seguridad, terrorismo o restituir el orden constitucional en los Estados miembros”.
Conocedores de la convocatoría de la reunión, el sábado noche, en la televisión nacional, el portavoz del autoproclamado general Abdourahamane Tianique manifestaba que "el objetivo de esta reunión es la validación de un plan de agresión contra Níger, a través de una inminente intervención militar en Niamey, en colaboración con países africanos que no son miembros de la organización y algunos países occidentales".
Fuerzas de inteligencia occidentales señalan que la mayor parte de los golpistas pertenecen a la guardia presidencial, y destacan "pequeños movimientos de apoyo en la calle, al grito de ‘viva Putin’, ‘viva Rusia’ y ‘abajo Francia", como se vió frente a la Embajada de Francia en Niamey.
Mali, Burkina Faso y Guinea Conakry son tres naciones que actualmente viven gobernadas por sendas juntas militares que accedieron al poder en los últimos años gracias a golpes de Estado. Pero si en el caso de Mali y Burkina Faso se "culpa" a la intervención de Rusia y el Grupo Wagner, en el caso de Guinea Conakry, Sissoco Embaló gobierna gracias a la ayuda de Macky Sall (presidente de Senegal), Muhammadu Buhari (presidente de Nigeria) y Adama Barrow (presidente de Gambia) y de los militares traídos desde estos países.
Asi que, supongo, que el caso de lo que es golpe o no, y de la legitimidad para que intervengan, depende de quiénes son tus amigos. El presidente Roosevelt, en este sentido, fue de lo más explícito en su famosa frase: "Es un hijo de puta, pero es nuestro hijo de puta".