Estos dos últimos días, el 23 y 24 de noviembre, el recinto ferial de Armilla, en Granada, ha acogido la 37 edición de la Feria Tecnológica de Acutel, que ha reunido a la mayor concentración de operadores locales y proveedores, y que ya el primer día, a eso de las 12.30 horas, presentaba llenazo con unos 2.500 visitantes, la mayor parte de los representantes de sus “170 empresas que operan en 225 localidades, y ofrecen servicios de internet, telefonías fija y móvil y televisión. Entre sus asociados se encuentran igualmente televisiones locales que emiten por TDT”. La mayor parte de ellos andaluces, ya que ACUTEL es la Asociación de Operadores de Telecomunicaciones Locales, una entidad que se constituyó en 1992 como asociación andaluza y daba en junio de 2021 su salto a organización nacional.
Si alguien merece la Medalla al Mérito en el Trabajo o similar son los Operadores Locales de Telecomunicaciones, empresarios tremendamente vinculados a sus pueblos y ciudades (170 empresas de 225 localidades) y que llevan las comunicaciones donde muchas veces a los “grandes” no les es rentable llevar. Muchos tienen barca de pesca, ninguno yate y por supuesto no disfrutan de un Falcón, ni alquilándolo.
Hasta la hora de la comida (de menú y en la propia feria) me pareció una feria tecnológica similar a todos los años, donde se conocen novedades, se contratan servicios, se miran posibles inversiones, etcétera. Pero durante la comida, los móviles empezaron a recibir y reenviarse la siguiente noticia: Sigue la fuga de patrimonios: el CEO de Avatel traslada su sociedad a Luxemburgo, una información de TheObjective en la que se informaba que José Ignacio Aguirre mueve la sede de la firma con la que controla el 25% de la quinta operadora española.
Y, de repente, el estado de ánimo cambió. Y es que para los operadores locales AVATEL no es una operadora más. Es la segunda operadora de capital español tras telefónica (Orange es francesa, Vodafone, inglesa y DIGI, rumana. Pero sobre todo, la que más operadores locales ha comprado, con más de 130. Y si el que te compra no está este año en la Feria (ha estado en todas) y encima huye de España, malo. De repente cambió el ánimo y hasta la asistencia a la Feria. No sé si la seguridad será cibernética, lo que tengo claro es que la in-seguridad se hace viral en el empresariado.