David Espí, uno de los miles de voluntarios que han dejado de lado sus vidas para ayudar en las zonas afectadas en Valencia por el devastador paso de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), ha compartido este domingo un nuevo testimonio con Escudo Digital a través de un vídeo grabado en formato selfie.
Este vídeo continúa su relato inicial, en el que describía la devastación y la desorganización que percibió en sus primeros dos días como voluntario.
"Hay una carencia total de bombas de achique"
En esta ocasión, David señala varios aspectos que considera fundamentales para poder hacer frente a la catástrofe causada por la gota fría. Entre ellos, incide en la importancia de establecer una "coordinación local", que optimice la ayuda de voluntarios y la utilización de recursos, y de dotar las zonas afectadas con más bombas de achique para poder extraer el agua que todavía está acumulada en los garajes y plantas bajas de los edificios.
"Hay una carencia total de bombas de achique, y desde aquí hago un llamamiento para que haya una viralización para poder coordinar las bombas de achique", declara David, que pide que las bombas de achique no se queden almacenadas en lugares como Liria y lleguen a las zonas afectadas por la DANA, donde son realmente necesarias.
Por otra parte, resalta la necesidad de mantener la ola de solidaridad que ha desencadenado la DANA y el hype que está generando. "Entramos en una semana de trabajo y ese hype o interés va a bajar, pero debemos mantenerlo", advierte.
Para que la ayuda sea efectiva el próximo fin de semana, sugiere que la gente trate de detectar los "excesos y carencias" en las zonas afectadas, de forma que se puedan gestionar mejor los esfuerzos y recursos.
El voluntario también reclama que la ruta de voluntarios sea abastecida con servicios y equipamientos básicos, como transportes que les trasladen desde puntos neurálgicos a las zonas cero, urinarios portátiles o lavabos. Además, subraya la importancia de prestar una especial atención a la asistencia de las personas mayores.
Finalmente, David aborda las críticas que acusan a los voluntarios de "molestar más que ayudar" en algunos casos. Para él, esta visión no es representativa de la realidad y asegura que los voluntarios son esenciales, siempre y cuando su trabajo esté bien dirigido. En este sentido, destaca la labor que se está realizando en el centro de voluntarios establecido en la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, pero insiste en la importancia de una mayor coordinación a nivel local.