La inmensa mayoría de los funcionarios de prisiones nunca creyeron su versión. Y los hechos han demostrado lo que sospechaban. La directora de la cárcel de Villena, quien pudo haber filtrado la cinta en la que unos funcionarios reducían a un preso, fue detenida en el día de ayer por los delitos de denuncia falsa y simulación del delito, y posteriormente quedó en libertad en el marco de unas diligencias que continúan abiertas. La Guardia Civil la llevó ayer a los calabozos por haber simulado a principios de septiembre que varios encapuchados la golpearon cuando salía de su casa amenazándola con que tuviera "la boca cerrada". En la mañana de hoy ya ha sido cesada.
¿Qué pretendía? Supuestamente cubrirse las espaldas ante la investigación sobre la reducción de tres funcionarios a un preso con problemas de salud mental el pasado 16 de agosto que salió poco después de la cárcel. El preso en cuestión fue detenido de nuevo en Trancón tras cometer una agresión sexual. Al ser ingresado en el Centro Penitenciario de Cuenca intentó cortar la yugular del jefe de prisiones, que pudo haber muerto como consecuencia del ataque.
La detención a la directora de la cárcel de Villena se ha realizado por los delitos de denuncia falsa y simulación del delito, según ha publicado el diario Levante. Los sucesos acaecidos, antes de que se supiera lo ocurrido, provocaron una situación incomprensible para gran parte de la opinión pública, y sobre todo para los funcionarios de prisiones y sus familiares.
La denuncia fue seguida de una concentración en apoyo a la subdirectora en la que participó el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también defendió a esta trabajadora, a la que definió como "una verdadera funcionaria".
Los hechos dieron pie a una investigación judicial por las amenazas que supuestamente recibió este alto cargo de la cárcel alicantina en su teléfono móvil tras la revisión de las cámaras de seguridad por un incidente en una reducción a un preso el 16 de agosto, con la implicación de tres funcionarios de prisiones.
Como subdirectora de Seguridad era la única persona que tenía la competencia en la custodia de estas imágenes, dentro de una investigación en la que declaró ante la inspección del centro penitenciario. Según su relato, según informa Europa Press, los asaltantes encapuchados la golpearon y le exigieron que mantuviera "cerrada la boca".
"Si Marlaska no dimite ahora, no lo hará nunca"
Aquello indignó a los sindicatos, se convocaron concentraciones por la criminalización ante la opinión pública de los funcionarios, y más en el caso de un preso peligrosísimo con problemas mentales en un modelo penitenciario, el español, que carece de médicos para tratarlos. ACAIP-UGT, en un comunicado del que se hizo eco Escudo Digital, expresó su indignación porque a los funcionarios que se defendieran del preso se le linchó en diversos medios, mientras se desprestigiaban las funciones de los funcionarios.
Y el Ministerio del Interior no hizo nada para defender el honor del colectivo. Más bien al contrario: "Estamos convencidos de que, en esta ocasión, no habrá filtración de las imágenes de las cámaras de seguridad ni convocatoria de la Secretaría General a la puerta de los centros. Urge la consideración de autoridad de los trabajadores penitenciarios, no hay excusas para seguir dilatando esta medida".
Fuentes del Ministerio del Interior no afines a Grande-Marlaska señalan que, si no dimite ahora, ya no lo hará nunca. Lo ocurrido es demasiado grave. A ello se suma la complicada situación que viven los trabajadores de prisiones, con muchas reivindicaciones pendientes, y no solo económicas. El pasado 23 de septiembre ACAIP-UGT y CSIF declararon "el conflicto colectivo en prisiones por los compromisos incumplidos por parte de los cargos que asumen responsabilidades en la administración penitenciaria y por la falta de respeto hacia los profesionales penitenciarios y el trabajo que desarrollamos".
Y es que lo de la cárcel de Villena es pecata minuta si lo comparamos con otros hechos acaecidos en diversas prisiones o relacionadas con presos que fueron liberados demasiado pronto. A finales del mes pasado, en el Centro Penitenciario de Jaén, una profesora sufrió un intento de agresión sexual por parte de un interno, que se saldó con lesiones para ella; y lo que es más grave, la sociedad ha tenido que lamentar la muerte de un niño de nueve años en Lardero a manos de un liberado condicional al que se le había concedido el tercer grado en contra de los informes elaborados por los profesionales penitenciarios de El Dueso.
El mundo al revés, los funcionarios, tratados como delincuentes, y los delincuentes, como víctimas
El pasado lunes 15 de noviembre, a las diez de la mañana, frente a la subdelegación de Gobierno de Jaén, los funcionarios se manifestaron como protesta ante estos hechos. Y concedieron una rueda de prensa en la que detallaron las medidas exigidas por el sindicato para paliar la lacra que se sufre en prisiones con el aumento de la gravedad de los ataques a los trabajadores penitenciarios, y se expusieron los motivos por los que se solicitaba el cese del director de la prisión de Jaén por la gestión del centro, así como los incidentes que han tenido lugar en el centro.
ACAIP-UGT y CSIF iniciaron un encierro en la secretaria general de Instituciones Penitenciarias el día 16 como medida de presión para desbloquear las negociaciones con la administración de las mejoras necesarias en prisiones. El encierro fue protagonizado por el presidente y responsable de ACAIP-UGT y CSIF, respectivamente, que fueron desalojados por la policía. El desalojo se produjo después de comunicar la posible imputación de delitos de coacciones, desobediencia y allanamiento de domicilio de persona jurídica. Adjuntamos vídeo con las declaraciones de ambos portavoces sindicales.
La situación es absurda, en función de algunos funcionarios de prisiones con los que ha hablado Escudo Digital. Se han sentido como delincuentes en las últimas semanas por culpa de lo acontecido en Villena, y el apoyo que prestó Marlaska a la subdirectora detenida.
La subdirectora ha quedado en libertad tras el arresto, pero será cesada
En la mañana de hoy Instituciones Penitenciarias ha cesado a la subdirectora de seguridad de la cárcel de Villena (Alicante) detenida por un delito de denuncia falsa tras asegurar a principios de septiembre que varios encapuchados le habían golpeado a la salida de su casa y amenazado con que tuviera la "boca cerrada", según confirman a Europa Press fuentes de la institución dependiente del Ministerio del Interior.
Desde Instituciones Penitenciarias también han señalado que están a la espera de la comunicación oficial de la detención para adoptar medidas con la apertura de un expediente disciplinario a la subdirectora de seguridad. Dicho expediente es un trámite abierto en paralelo a la destitución del cargo.