La asociación profesional Justicia para la Guardia Civil (JUCIL) ha denunciado a través de un comunicado la "reestructuración encubierta" que ha puesto en marcha el Ministerio del Interior sobre el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), que tilda de "diabólica" y prevé puede implicar la desaparición de más de 100 patrullas.
Para tratar de frenar esta transformación, JUCIL ha elevado un escrito al director de la Guardia Civil, Leonardo Marcos, en el que reclama la elaboración de un plan de restructuración de SEPRONA alternativo, según anuncia en su comunicado. Más concretamente, pide un plan "acorde a las necesidades medioambientales reales, transparente y que contemple la situación de todos los componentes afectados, de forma que se dé la posibilidad de acceder, de forma preferente, a las nuevas vacantes del SEPRONA que surjan dentro de su comandancia y que se tenga en cuenta, además, la conciliación familiar y su desarrollo personal".
Genera serias preocupaciones y resultará en una menor operatividad
En su carta, firmada por el secretario nacional de Formación y Especialidades y miembros del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de JUCIL, David González Sequera, la asociación expresa las "serias preocupaciones" de muchos integrantes de SEPRONA con respecto a los "cambios encubiertos, pero claramente evidentes que se aplican sobre este servicio".
JUCIL comparte sus preocupaciones y califica los cambios como "altamente perjudiciales" para su labor y para su calidad de vida. Uno de los aspectos que considera más alarmantes es el perjuicio que da por sentado sufrirán los integrantes de SEPRONA debido a la sobrecarga de trabajo que va a provocar el bloqueo de plazas vacantes en las patrullas funcionales.
Y es que, según explica JUCIL, el método elegido para la reestructuración es esperar a que se produzcan vacantes en las unidades que se pretenden suprimir, para después anunciarlas en otras unidades, obligando a los agentes afectados a permanecer en su unidad actual sin el personal suficiente o a pedir cualquier otro destino no deseado. Ese será el momento que "la Administración aprovechará para cerrar esa unidad y publicar nuevas vacantes del SEPRONA, que por lógica no podrán pedir estos compañeros, por estar sujetos a plazos de mínima permanencia en sus nuevos destinos, con la consiguiente pérdida de personal formado y con experiencia, lo que redundará sin duda en una menor operatividad de la especialidad", apunta González Sequera.
Cambia el enfoque de SEPRONA a un servicio puramente punitivo
La asociación también critica que la transformación ideada por Interior pretende modificar el enfoque de SEPRONA, que realiza una labor preventiva, coercitiva y punitiva por todo el territorio nacional y pasaría a ser "un medio casi de forma exclusiva punitivo", lo que advierte no solo afectaría su labor diaria, sino que también impactaría negativamente en la protección del medio ambiente.
"La sola existencia de la patrulla en el ámbito territorial asegura un altísimo grado de cumplimiento de la normativa ambiental, algo irrenunciable a la especialidad y que, con esta reorganización notará sin duda el medio rural y su realidad medioambiental, y la protección de flora y fauna, así como el correcto trato a los animales", avisa David Sequera, quien también ha remarcado que SEPRONA es una de las especialidades que más rédito proporciona a la Benemérita ante la opinión publica y los organismos internacionales.
Una transformación escasa de transparencia que representa "un ataque a la esencia misma del servicio"
Además, manifiesta su inquietud por "la falta de transparencia y claridad de este proceso", lo cual alimenta la "extraordinaria incertidumbre" que se respira entre todos los guardias civiles afectados.
"Parece evidente que desde la Administración se ha iniciado una reorganización del SEPRONA en la que se oculta de manera deliberada a los componentes de las unidades afectadas el proceso de desmantelamiento", afirma el secretario de Formación y Especialidades de JUCIL. Así, se "condena" a los componentes a "aguantar estoicamente en esas unidades, de por sí muy sobrecargadas de trabajo y a las que, por carecer de personal suficiente, se les castiga irremediablemente a soportar una carga de trabajo suplementaria, si no quieren perder su destino y, por ende, su vida personal y profesional", agrega.
A modo de conclusión y en nombre de todo JUCIL, González Sequera, insiste en su oposición a esta reestructuración de SEPRONA asegurando que representa "un ataque a la esencia misma de nuestro servicio, rompiendo un modelo de éxito contrastado por otro eminentemente penal, que todavía tiene que demostrar eficacia y resultados". Por ello, la asociación insta a reconsiderar este plan de transformación y a que se trabaje de forma conjunta "para encontrar soluciones que beneficien a todos los implicados".