¿Alguien puede dejar al descuido 4,3 millones de euros? Pues ocurrió, y aunque eran falsos, el despiste le ha costado muy caro a una de las mayores redes de falsificación de moneda. La Policía Nacional y los Mossos d’Esquadra han desmantelado en la Nucia un gran laboratorio de falsificación de moneda, en una operación que fue llevada a cabo al unísono en las provincias de Valencia, Teruel y Barcelona donde se han llevado a cabo siete registros y seis detenciones al cierre de estas líneas entre Sagunto y Xirivella. La mochila fue encontrada hace un año en una zona boscosa situada en un lugar boscoso en la localidad del Cervelló. Y todas las pistas conducían hacia Tomás M.J, un artista de la falsificación. Ya había cumplido penas de prisión con anterioridad tras el desmantelamiento en el 2009 de otro taller de falsificación encontrado en Gandía, donde falsificaban billetes de 500. Entonces se intervinieron 8.000.000 de euros en lo que fue calificada como la paralización de la fábrica más importante de Europa.
El presunto jefe del grupo vivía en La Nucia, y allí se encontraba su imprenta clandestina. Los registros tuvieron lugar ayer miércoles por la mañana en una urbanización de la playa de Corinto de Sagun, Xirivella, Nucia y Villajoyosa; y del mismo modo en Cataluña, en Barcelona, Cervelló y Sant Cugat del Vallés, según informa el diario Levante.
En el registro de la Nucia se ha confiscado maquinaria y no se han encontrado billetes, pero se ignora de momento lo hallado en otros locales. La causa estaba ayer bajo secreto de sumario. . Hasta este miércoles la causa estaba bajo secreto de sumario.
Tuvo problemas de suministro de materias primas procedentes de China durante la pandemia y tuvo que parar su actividad
Según afirma el citado diario, el arrestado, impresor con amplios conocimientos en artes gráficas, reclutó a dos miembros de su banda cuando se encontraba en la prisión de Picassent.
Tras el hallazgo de la bolsa con los 4,3 millones de euros, los Mossos tuvieron noticias de varias denuncias por pagos con billetes de 500 euros falsos en la zona de Cervelló, efectuados por personas con falsa identidad. Poco a poco fueron siguiendo los pasos de los pagadores mediante su identificación con las huellas dactilares. Posteriormente se intervino el teléfono de los sospechosos. Ha transcendido que su actividad, como la de muchos otros españoles, hubo de ser suspendida tras la pandemia por culpa de la dependencia de China. Muchas de las materias primas que necesitaban para su falsificación procedían del país asiático. Actualmente tenían pensado realizar un viaje a China para proveerse de material y estaban buscando financiación.