Los Gobiernos de Burkina Faso, Malí y Níger, que conforman la Alianza de Estados del Sahel (AES), han enviado una carta conjunta al presidente del Consejo de Seguridad de la ONU para "denunciar el apoyo abierto del Gobierno ucraniano al terrorismo internacional", después de que se hiciera pública la supuesta colaboración de Kiev con grupos rebeldes del país.
"Destacando que los actos reivindicados oficialmente por Ucrania, el Estado agresor, constituyen una amenaza directa a la paz y la seguridad internacional, en particular del Sahel y África, instamos al Consejo de Seguridad, principal responsable del mantenimiento de la paz y seguridad, a tomar medidas apropiadas contra estas acciones subversivas que fortalecen a los grupos terroristas en África", han pedido.
En la carta, hacen referencia a los "desagradables comentarios subversivos" del portavoz del servicio militar de Inteligencia ucraniano, Andrei Yusov, que admitió la colaboración con los rebeldes tuareg en el norte de Malí, quienes recientemente protagonizaron uno de los episodios más sangrientos del conflicto al matar a 47 militares y 84 mercenarios del grupo ruso Wagner.
"Admitió la participación de Ucrania en el ataque cobarde, traidor y bárbaro de los días 24, 25 y 26 de julio cuando grupos terroristas armados causaron la muerte de miembros de las Fuerzas de Defensa y Seguridad en (la localidad de) Tinzauatene, así como importantes daños", ha informado el Ministerio de Exteriores maliense a través de su perfil en la red social X.
En este sentido, han agregado que "estas declaraciones fueron confirmadas por el embajador de Ucrania en Senegal, Yuri Pivovarov, "quien expresó abiertamente y sin la menor duda el apoyo de su país al terrorismo internacional, en particular en el Sahel". Así, han señalado que es "peor todavía" que "estos altos funcionarios ucranianos han anunciado públicamente otros 'resultados' por venir".
"Estas afirmaciones, que son extremadamente graves, van más allá del alcance de una injerencia extranjera, que es en sí misma reprobable. Se trata de un apoyo oficial e inequívoco del Gobierno de Ucrania al terrorismo en África. Estos actos constituyen también una violación a la soberanía e integridad territorial de nuestros Estados, una clara agresión a nuestros países y un apoyo al terrorismo internacional, en flagrante violación de la Carta de Naciones Unidas y convenios internacionales", reza la misiva.
Las tres juntas militares, a través de sus ministros de Exteriores, han condenado "enérgicamente la agresión y la glorificación del terrorismo por parte de las autoridades ucranianas, que no puede justificarse". Por ello, han instado al Consejo de Seguridad de la ONU a "asumir sus responsabilidades ante la decisión deliberada de Ucrania de apoyar el terrorismo, un flagelo cuyo rechazo es unánime a nivel internacional en todas sus formas y manifestaciones".